Lo peor del Real Madrid no es perder. Lo peor del Real Madrid no es perder el otro día. Lo peor del Real Madrid no es perder el otro día con el Barcelona, ni siquiera por tres cero; lo peor está por llegar.

Lo peor, aunque para muchos sea lo mejor, es tener esa plantilla. Lo peor es coleccionar “balones de oro”, “estrellas”, “galácticos” o figuras del fútbol. Nunca se puede construir un equipo con tantos a mandar y tan pocos a obedecer. O lo que es igual: muchos jefes y pocos indios.

Ya en un artículo anterior, sobre la marcha de Camacho, poníamos sobre la mesa lo difícil que es el resultado de una suma, si los sumandos están descolocados. Hoy, con esta derrota merecida y aleccionadora, se pone de manifiesto, de nuevo, que tener sumandos, gente que suma, no necesariamente dará resultados.

Nadie va a discutir la categoría de Zidane, Ronaldo, Figo, Raúl y compañía, lo discutible es que ellos puedan, hoy, formar un equipo con aspiraciones de ganar. Parece complicado aseverarlo, pero es así. Qué motivación les guía, qué espíritu les anima; es más ¿y para qué?. Cada uno de los llamados galácticos del Real Madrid, son llamados así por sus logros, nada discutibles por otra parte. Lo discutible es si aspiran a lo mismo, pues ya lo han ganado todo individual y colectivamente, otra vez y con qué empeño.

Esa es la cuestión. Ninguno daría la vida por ganar la Copa de Europa; Eto’o sí y Ronaldiño también. Pujol y Xavi, darían aún más, como culés que son. ¿Y qué se podría decir de obtener uno o dos balones de oro en los próximos tres años entre los jugadores de la plantilla del Barcelona? ¿Qué darían?. La respuesta es todo.

Con ser esta conclusión determinante, lo es aún más la edad. Esos jugadores del Barcelona no sólo están ansiosos por lograr lo que los otros, los del Madrid, ya tienen, sino que tienen una edad más lógica para aspirar a esos galardones. El Real está cuajado de jugadores que ya pasaron esa etapa de ascender y, lamentablemente, están en la de descender. Y no es que sean viejos, todos no. Lo que si son todos es viejos conocidos y eternos y también viejos ganadores al margen de su edad. Aunque Ronaldo sea joven está de vuelta de la carrera por querer ser. Ahora, para estimularle habría que proponerle ser astronauta, por ejemplo. A su homólogo del Barcelona, se le estimula con decirle que pueden ganar la Champions. Radical diferencia. Y así todos. Uno a uno y colectivamente. Igualito Raúl con sus entorchados que Pujol a la búsqueda de los mismos.

Pero decíamos que lo peor está por venir. Y eso no le ha de suceder a ninguno de los jugadores, sino a la institución. Cómo se deshace, aunque quisiera en un arranque de realismo, de tantos jugadores de precios estratosféricos, contratos indefinidos y sueldos  multimillonarios. ¿Quién se los va a comprar? ¿Cómo desprenderse de ellos?, si cuesta trabajo ceder a alguno, para que soporten la ficha anual, sin necesidad de ser galáctico. Y llegado el caso, ¿alguna de las estrellas consentiría una cesión?. Convengamos que no.

Luego entonces, hay peor problema en los despachos que en el césped. Y eso, todo, se le debe a su presidente, Florentino Pérez. Cumplió su sueño de tener en el mismo grupo, no equipo, a tantas estrellas y según se fueron llegando, dejaron de ir llegando los títulos que en un principio consiguió. Claro síntoma de cuanto ya dijimos de los sumandos. Y suerte tuvo que los éxitos acompañaron esa primera gestión.

Basta con que los contrarios prueben, como hizo el Barcelona, qué interés, entusiasmo e intensidad ponen los jugadores del Madrid en la disputa y la búsqueda del balón, para darse cuenta de que sus ansias por llegar lejos en el fútbol las dejaron atrás. Si les dejas el balón, lo disfrutan y saben jugar ¡¡cómo no!!, pero y si no lo llegan a tener, ¿mueren por él?. No serán viejos de edad, sino de logros. Una condición que el ser humano, manifiesta en cualquier actividad.

Como reflexión quiero dejar una pregunta en el aire ahora que se avecinan los Reyes Magos: ¿Es la misma ilusión esperar el primer balón de los Reyes o cuando ya sabes que son los padres, o tus ahorros, y te puedes comprar cinco o seis a la vez?. Si la respuesta es la que yo sospecho, ya sabes lo que le pasa al Madrid y lo que es peor, lo que le puede pasar.