Con la beatificación de la Madre Teresa se hace más universal, si cabe, su obra. La rapidez con la que se la ha llevado a los altares, no es ni más ni menos que la misma con la que el conjunto de los seres humanos, habían comprendido la diferencia entre ser santo y ser solamente uno mas.
Nunca, la humanidad había tenido tan claro qué es ser santo. Nunca, los que habitamos el planeta, habíamos tenido oportunidad de conocer la obra tan de cerca de quien estaba llamado a los altares. Y no cabe ni una duda. Ni una sola duda deja en nosotros la capacidad de méritos para tan alta distinción. Su sacrificio por los más necesitados, su abnegación por el trabajo positivo pero desinteresado, deja una imagen nítida de cómo tiene que ser entendido el amor, la misericordia, la solidaridad y la lucha por mejorar la vida de los demás. En suma, la verdad del cristianismo.
Esta mujer de origen albanés, nacionalizada en la India, no es el vivo ejemplo de la lucha por la paz, por lo que consiguió el Premio Nóbel en 1979, sino es la Paz en sí misma. El estado de reconciliación permanente con cada uno de sus semejantes. Ese estado de Paz interna, proyectada al exterior, pacificaba cada cuerpo que tocaba. No le hacía falta luchar por ella, la encontraba en cada uno de sus actos. Con ella, los seres humanos adquirimos la dimensión de entendimiento de lo que representa un santo del Siglo XX. Todo ello reconocido, acertada y rápidamente, por la Iglesia -la humanidad ya lo reconocía- en tiempo record, propio de este Siglo XXI.
La Iglesia y las gentes que poblamos este Planeta, pocas veces habremos estado tan de acuerdo en algo. Ni una sola voz, ni una sola mano se puede alzar contra la decisión que toma la Iglesia hoy, pero que ya hace mucho que la teníamos todos en nuestra mente y nuestro corazón.
Hoy, cuando el mundo está inundado de hombres y mujeres cuya imagen representan los iconos de la sociedad actual, no podemos pasar por alto que la mayor belleza de Teresa eclipsa cualquier Verónica o Claudia, o Angeline, o... cualquiera de los personajes políticos, artistas o famosillos que inundan las portadas de la prensa mundial. Por eso, y por toda su obra naturalmente, es bueno que las portadas de hoy reflejen la imagen del amor que ella representa. Un día, al menos, un aire fresco y auténtico, traerá a cada uno de nosotros el mensaje de que existe un mundo mejor: aquél en el que esté presente la imagen de Teresa de Calcuta. La Iglesia y la sociedad tienen puntos de encuentro y reconciliación. Ahí, en Teresa, están las pruebas.
La Orden Religiosa creada por la Madre Teresa pretende inundar el mundo allá donde se las necesite, pero el mundo es tan grande y tantas las desigualdades y necesidad, que todos deberíamos ser Teresa de Calcuta para lograr el milagro del Amor. Un reto tan difícil como bello sería el conseguirlo. Por eso, quiero dejar constancia a continuación, en recuerdo y homenaje, cuales eran Los Mandamientos que guiaban los actos de la Madre Teresa. Cada uno una perla, cada uno un compromiso, cada uno una verdad:
EL DÍA MÁS BELLO ............................... HOY
LA PRIMERA NECESIDAD .......... COMUNICARSE
LA RAÍZ DE TODOS LOS MALES ... EL EGOISMO
LA PEOR DERROTA ................ EL DESALIENTO
EL OBSTÁCULO MÁS GRANDE .......... EL MIEDO
EL PEOR DEFECTO ................. EL MAL HUMOR
LA PERSONA MÁS PELIGROSA ... EL MENTIROSO
LA COSA MÁS FÁCIL ................ EQUIVOCARSE
EL MAYOR ERROR .................. ABANDONARSE
LA RUTA MÁS RÁPIDA ........ EL CAMINO RECTO
LOS MEJORES PROFESORES ........... LOS NIÑOS
EL MISTERIO MÁS GRANDE ............ LA MUERTE
LA FUERZA MÁS POTENTE DEL MUNDO .... LA FE
EL MAYOR REMEDIO ................. EL OPTIMISMO
EL RESGUARDO MÁS EFICAZ ......... LA SONRISA
LA DISTRACCIÓN MÁS BELLA ......... EL TRABAJO
LA MAYOR SATISFACCIÓN.. EL DEBER CUMPLIDO
LA MAYOR FELICIDAD.... SER UTIL A LOS DEMAS
EL SENTIMIENTO MÁS RUÍN ........... EL RENCOR
EL REGALO MÁS BELLO .................. EL PERDON
LO MÁS IMPRESCINDIBLE ................ EL HOGAR
LAS PERSONAS MÁS NECESARIAS ....LOS PADRES
LA SENSACIÓN MÁS GRATA ..... LA PAZ INTERIOR
LA COSA MÁS BELLA DEL MUNDO......... EL AMOR
Con su beatificación, no solo se ha hecho justicia, sino que se ha declarado El Amor a los demás como el lema más digno, necesario y obligado para la Humanidad. Un lema y un camino que Teresa, la de Calcuta, la del mundo entero, nos legó. Gracias Teresa; sin ti éramos todos más pobres.
