Hace casi un mes, el famoso revistero taurino español Manolo Moles escribía en Aplausos que el país galo representaba el rigor y la seriedad en tauromaquia. Ha alabado la calidad de los aficionados a los toros Franceses que van a la plaza para tener emociones y no para divertirse. En efecto, no es un jugar de lidiar un toro bravo, un hombre se juega la vida y eso se respeta. Ha hablado en particular de la plaza de toros de Lachepaillet en la ciudad de Bayona que según él es una referencia. Es verdad que durante toda la lidia, la gente mira el festejo respetando a los toreros y los toros. Los trofeos son siempre merecidos y tienen mas valores que en las plazas de segunda categoría en España.
La semana pasada, tuve el placer de descubrir por primera vez la plaza de toros de Castellón y su feria de la Magdalena. Todo el mundillo taurino dice que una buena prestación en Castellón puede influir en la temporada porque se trata de una feria del principio del año y sobre todo tiene mucha credibilidad con su rigor.
En 4 días, pude ver 14 orejas, 5 salidas a hombros y al final ver que el triunfador se llama Manuel Jesús “El Cid”.
Primero, me duelo las reseñas sin comentarios porque no reflejan la realidad del festejo. En efecto, la ultima corrida es la más significativa de mis notas. El lote de la ganadería de Jandilla salió muy noble, permitiendo así una posibilidad de triunfo a los tres matadores. El jefe de lidia de la ultima corrida de la feria fue Jesulin de Ubrique. Había ya ganado las orejas al hotel, fue el torero lo mas esperado al Mindoro y su tarde fue sin gloria con dos faenas que no merecen orejas en plazas de segundo y probablemente ninguna en Francia en los pueblos. El tercero matador de la tarde fue David Fandila “El Fandi” quien hizo su show con los palos lo que permitió a la gente divertirse y realizó después dos “faenititas”. Al final, salió a hombros de la plaza con tres orejas mientras que una me parecía bien por su espada al sexto. Las ausencias del Fandi y de Jesulin en Francia no son una casualidad porque no interesan el publico aficionado y riguroso del país galo.
Es verdad que la televisión española retransmitía esta corrida y que hay que mostrar que la tauromaquia es una fiesta pero no me parece racional ir hasta el ridículo. El torero lo más profesional y que merece su contrato fue Julián López “El Juli”. Ha inventado una faena, ha toreado sus dos toros con temple como se lo enseña en todas las escuelas taurinas y solo cortó 2 orejas, una en cada toro. Merecía al menos 3 sino más. Lo sé que algunos piensan que las orejas no son importantes, estoy de acuerdo pero hay que todos los maestros sean considerados de la misma manera. El Juli, es el verdadero triunfador de la feria de la Magdalena 2006.
La víspera para la corrida de Victorino Martín, hubo también en mi opinión un escándalo en los trofeos. Primero, el presidente mostró el pañuelo azul antes del blanco para la oreja de Antonio Ferrera que estaba en la enfermería. De nuevo, ningún respeto del torero. El caso de Juan José Padilla semeja a Jesulin y a Fandi, ha ganado 2 orejas y una puerta grande sin mostrar nada de excepcional. Hizo su oficio de matador de toros matando un toro muy bien pero nada más. En cuanto al madrileño José Pedro Prados “El Fundí”, se jugó la vida, realizando una faena de categoría que podía abrirlo la puerta grande pero solo sale con una oreja, ha dominado su toro.
La corrida del Pilar también me ha sorprendido. Morante de la Puebla salió con los pitones mientras que había realizado todo lo que lo permitía su toro.
Por fin, la oreja de Matías Tejela es una verdadera broma, un trofeo sin torear.
No se trata de criticar a los toreros que saben como ganar las orejas pero el publico que pide los trofeos y los presidentes al palco que no valorizan así una plaza de segunda haciendo cualquier cosa.
En el numero de la semana pasada de Aplausos, Manolo Moles esta vez habla de la feria de su tierra: Castellon. Precisa que los aficionados de su ciudad quieren los toreros dispuestos a dar espectáculo....