Ante un cuarto de entrada se lidiaron toros de Jaral de Peñas bien presentados y buenos en conjunto, sobresaliendo el segundo y quinto por buen comportamiento.

El rejoneador Rodrigo Santos abrió plaza realizando una lidia espectacular haciendo gala de una doma extraordinaria para cortar las dos orejas.

El diestro de Tula, Jorge Gutiérrez, estuvo muy bien en su lote. En su primero cumplió. Ya en su segundo metió el acelerador a fondo para cortar dos orejas.

Carlos Rondero se llevó el lote soñado por cualquier torero. Nunca llegó a encontrar distancia  ninguno de los dos. En su primero benévolamente escuchó silencio y en el quinto pitos de un público que se sintió ofendido.

Marco Antonio Camacho mostró verdor y falta de sitio en sus dos toros escuchando silencio en ambos.