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Con más de media entrada en los tendidos se han lidiado toros de El Ventorrillo (1º, 4º, 6, y 7º, sobrero que regalo) y Mollalta (2º, 3º,5º) bien presentados y de juego desigual. Aníbal Ruiz, ovación con saludos, dos orejas, oreja, dos orejas, dos orejas, dos orejas tras aviso y oreja en el sobrero. Se desmonteraron Oscar Castellanos, Miguel Ángel Ramírez en el 2º y Félix Jesús Rodríguez y Pablo Fernández en el sexto. Emoción era lo que se respiraba en el coso alcazareño, hoy el albero que vio jugar al niño se reencontró con el hombre, con el torero en la que sería su última tarde. Aníbal Ruiz se despidió hoy de los ruedos, y lo ha hizo como ha sido toda su carrera, demostrando profesionalidad y honradez. Se va uno de los grandes toreros que ha dado la mancha, un torero que se ha hecho a si mismo. Junto al alcalde de Alcázar En los tendidos de su tierra, toda su gente reunida, continuas muestras de cariño, sucesión de brindis emotivos, entre ellas a apoderados y personas que lo han acompañado a lo largo de sus más de veinte años en el mundo del toro, y esa última dedicatoria para una de las personas más especiales para él, su hijo. La presentación de los toros del Ventorrillo y Mollalta, especialmente estos últimos fue impecable, astados escogidos por el propio torero que lucieron buenas perchas y un trapío propio de una plaza de primera categoría.
Recorte de capote Lástima que a la tarde a pesar de todas las cariñosas orejas, diez nada más y nada menos, le faltara rotundidad para haber conjuntado la emoción con un resultado artístico de más calado. El viento fue uno de los enemigos del torero y le impidió un mayor lucimiento, dejándole al descubierto muchas veces, tampoco hubo la variedad que requería un festejo de este tipo, especialmente con el capote.
Con la diestra Destacó en el cuarto toreando con temple y despaciosidad sujetando la embestida del huidizo toro del Ventorrillo. En el sexto comenzó sentado en el estribo y toreando de rodillas, con este toro con la embestida rebrincada consiguió lo mejor de la tarde como fue el buen toreo al natural con el que Aníbal se dejo el alma, profundidad y largura en sus telas. En los demás trasteos hubo detalles de mando y poder pero sin llegar a despuntar todo lo que el torero hubiera querido.Salida triunfal Gracias Aníbal por todos estos años...
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