Ficha del Festejo

Con cielo límpido y por fin con una agradable temperatura se desarrollo el décimo tercer festejo ferial. Hoy hacía su presentación o debut una ganadería del campo charro salmantino, “Pedraza de Yeltes“, que no lo ha sido con buen pie que digamos para tres toreros queridos por Madrid: Uceda Leal, Eduardo Gallo y David Mora.

-Hoy no ganamos para sustos-, varios de los de plata milagrosamente salieron indemnes y sin mayores consecuencias que los golpes y porrazos, hasta uno de los de oro también se libró de ir a parar a la enfermería, gracias a esos quites prodigiosos con el percal oportuno. Algunos al salir de la plaza, a todos estos inconvenientes, lo calificaron como emoción, si ellos lo vieron así, con su pan se lo coman. Porque emoción, emoción por transmisión se entiende de los coletas no lo fueron.

Los toros debutantes no dieron la nota; Altos y zancudos todos ellos, feos y destartalados de hechuras, bien armados, con muchos kilos sobre sus lomos, más bien mansos encastadillos y el sexto peligroso; el quinto tuvo que ser devuelto antirreglamentariamente, ya que nada más salir, se dio un espeluznante golpe contra la contera del burladero de matadores, quedando inválido para la lidia; siendo sustituido por el primer sobrero de José Vázquez, posiblemente siendo el mejorcito del encierro, por ello escuchó palmas cuando el tiro de mulillas se lo llevaron, otros dos que escucharon palmas camino del desolladero fueron: los que hicieron 2º y 3º del hierro debutante. Pesaron de media en la balanza 578 kilos.

Uceda Leal nunca vio la claridad del cielo de hoy

El primero de la terna era el madrileño Uceda Leal, un torero fino y elegante, que no termina de romper y sin duda alguna el que mejor maneja la espada de muerte en la actualidad, pero hoy nos dio un mitin con los aceros en el segundo de su lote. Con el que abrió plaza parecía que la cosa no iba con él; su largo cuerpo estaba en la plaza, pero su espíritu y su corazón no; latigazos fueron los pases de salida, se dejó tropezar el trapo por ambos pitones, simplemente le tocó los costados y a otra cosa mariposa. Pasaportó a su enemigo de Pinchazo, entera y dos golpes de cruceta. Pitos para el torero del barrio de Usera. Y menuda bronca en el cuarto, primero por torear siempre con la muleta retrasada, es decir esos afeados medios pases y encima con el pasito atrás, macheteó con la franela y a por el arma y siendo como es, un as con ella, la cosa se torció y más con el verduguillo, escuchando dos recados desde la presidencia, dando posiblemente el mitin más sonoro en su plaza madrileña. Bronca para el torero.

Algo con la diestra, algo con la siniestra...

Hoy tampoco cantó Eduardo Gallo en el ruedo de Las Ventas, aunque con la pañosa en la mano diestra y al inicio de labor consiguió tres redondos de buena caligrafía y de esas cosas que siempre hay en los toros; toro y torero a la limón cayeron al suelo, la segunda tanda por ese pitón fue al hilo aunque no estuvo mal la tercera serie, en los naturales se alivió y la música de viento no se hizo esperar. Lo mandó al paraíso de los animales con una entera más bien caidilla que surtió el efecto deseado. Pitos con aviso para el de Salamanca. Con el sobrero logró hasta ligar unos cuantos pases diestros, con la mano contraria, trazó un excelente natural que se le agradeció con palmas, también sobresalió el de pecho. Con la toledana pinchazo en el primer envite y en el segundo una estocada entera desprendida sumándole un certero golpe de verduguillo; otro recadito del Usía antes de que el sobrero doblara.

El remate de Mora tras el saludo al tercero

Sorteó de primero David Mora, un toraco con 582 kilos, alto de agujas, con cara y fuerza; a quien saludó con un ramillete de verónicas bordadas. Fue el único ejemplar que romaneó en el tercio de varas. Tras el brindis a la concurrencia y ya en las afueras, enjaretó cuatro buenos derechazos y el remate barriendo los lomos premiada por los parroquianos, por el zurdo pitón el de Pedraza nada quería saber, pero David lo consiguió a fuerza de insistir incluso jugándose el tipo como un jabato, cerró labor con manoletinas mirando al tendido. Tomó la espada para hendirla hasta la empuñadura que fue mortal de necesidad. Hubo petición de trofeo por parte del público, pero D. Julio no los vio suficientes y el madrileño dio la vuelta al anillo, con algunas protesta del tendido 7. Por lo menos en el sexto, una vez más vimos torear algo con el capote ya poco usual en estos tiempos. Este fue el toro más complicado de la tarde, los sustos y los disgustos estuvieron al orden del día. Al tendido 5 se fue Mora para iniciar quehacer de rodillas y por derechazos, ovación al canto, ya de pie, nos dio otro de los sustos de la tarde; el toro buscaba al diestro para ver como lo enganchaba y podía hacer presa. Con inteligencia y sabiduría David optó por machetear que era lo más oportuno, aunque eso ahora no es del gusto de los nuevos aficionados. Pidió la espada para dejar una estocada entera ligeramente desprendida. Silencio para el matador como también para su oponente.

Saludó Felix Jesús Rodríguez

De las cuadrillas: Se desmonteró el banderillero Félix Jesús Rodríguez, de la cuadrilla de David Mora. Palmas para el picador Mario Herrero, de la misma cuadrilla, y el banderillero Domingo Siro, a las órdenes de Gallo. Los banderilleros Pablo Ciprés, José Ignacio Rodríguez "Puchi" y José Luís Barrero sufrieron cogidas sin consecuencias.