Salieron cuatro toros de Valdefresno... primero, segundo, cuarto y sexto; y dos de Hermanos Fraile Mazas... tercero y quinto, ambas ganaderías de la misma procedencia... Lisardo Sánchez; y por eso todos los toros fueron mansos... débiles, sosos, en exceso dóciles... rayando en la asfixiante bobería, pero se han dejado torear... han tenido recorrido, fundamentalmente los tres primeros.No obstante, los señores toreadores que este viernes 20 de mayo partieron plaza... José Ignacio Uceda Leal, Manzanares Chico y Eduardo Gallo, han demostrado que usan el terno de luces, para ser... simples artículos decorativos del redondel.
¡Qué vergüenza!
Pudieron haber logrado sumar faenas que enseñaran su capacidad taurina... sus deseos de ser toreros; una voluntad a raudales y una entrega sin cortapisas. Una técnica depurada y la serena inteligencia para desarrollar su imaginación; pero... eso todo hace ver, que ni siquiera lo conocen.
El maestro César Rincón, hace tres días, con una magistral cátedra del toreo eterno, les mostró lo que es ser TORERO y por donde debe ir la Feria de San Isidro. Y estos señores no entendieron nada... porque no tienen capacidad de autocrítica.
Esto... ¡no puede ser!, y sin embargo es la más penosa realidad.
Que alguna fotografía engañosa... les enseñe dando un pase, no significa que sean toreros.
No se vaya a confundir, lector amigo, muchos trincones... mercenarios de la pluma taurina, que tanto abundan y gustan de confundir la buena fe de usted, sacan mucho provecho por publicar este tipo de fotografías mentirosas.
Porque una cosa es que la fotografía muestre al maestro Rincón cargando la suerte... adelantando la pierna de salida, aguantando y obligando a embestir al toro, mandando... tirando de él; y otra cosa es que uno de estos señoritos que aparecieron en la parte decorativa del festejo de hoy, puedan salir en la misma posición, pero con distinta intención... atrasando la pierna de entrada... la de recibo, con el fin de no exponer, sino de aliviarse inmediatamente y así expulsar al toro; y por eso reponen tanto terreno con muchos graciosos pasitos de ballet, para poder proseguir su burla.
Pueden ser dos fotos similares, pero en diferentes circunstancias, una nos demuestra lo que es un torero y otra... lo que simplemente es... un artículo decorativo del redondel.
Uceda Leal desperdició a sus ejemplares, fundamentalmente al primero que fue el mejor. Anduvo perdido sin comprender lo que podía haber logrado hacer. Vino, cumplió con presentarse y “adornar” el ruedo, y se va en medio del repruebo total. Nadie lo quiere volver a ver.
Manzanares Chico... desbordando un océano de cinismo, no pudo mandar sobre sus mansos y “tontuelos” ejemplares. Decir que naufragó en una mar de mediocridad, no es ninguna noticia, se le conoce no sólo en España sino en México y Sudamérica. Se sabe bien de sus deficiencias y de sus nulas posibilidades como torero. Ya le dieron la oportunidad de confirmar en Madrid, de otro festejo en el que reiteró lo antes expuesto, es tiempo de retirarse y colgar en la pared de sus recuerdos, lo que pudo ser, pero no fue.
Y Eduardo Gallo, que pierde el tiempo con poses absurdas, actuando de torero. Lo que demuestra que no es torero.
Una cosa es actuar... porque se representa un papel, algo que no le pertenece, pero que le puede dar vida... una vida ficticia; y eso hace el señorito Gallo, actúa de torero, y lo peor es que no sabe ni representar ese papel. Sus toros eran una aburridas “hermanitas de la caridad”, y aún así, se impusieron sobre el toreador, quien se vio perdido, en un inmenso cúmulo de confusiones.
¡Qué pena con estos toreadores!... ¡Sí!, que pena, porque confunden la grandeza de ser toreros, con el de ser simples artículos decorativos en el ruedo.... y si no, que se lo pregunten al maestro Antoñete, quien debe tener en su recuerdo, al manso Atrevido de Osborne.