Me pregunto si debe llamársele una oportunidad el actuar en la Plaza México cuando a esta asisten menos de mil personas teniendo capacidad para albergar a cincuenta mil espectadores. Démonos cuenta además, que la gente pierde interés en cuanto pasan los carteles de aniversario entonces, para que alargar una Temporada.
En cuanto a las transmisiones por televisión o radio, en caso de que haya algún triunfo, ¿este tendrá repercusión cuando gran parte de la posible audiencia se encuentra acaparada por los recientes programas de moda llamados “reality shows”?. Una competencia difícil, no cree usted.
Por otro lado, según recuerdo, aquél que recibía la oportunidad de venir a la Plaza México, era el torero que realizaba una buena campaña por diversos cosos del país, pero ahora es distinto; resulta que hay que triunfar en México para que el país se abra a dar oportunidades. ¿Se da cuenta de la poca importancia que se le ha dado a la Plaza México, que se ha devaluado más que el peso?
Toreros, mejor dicho, personas como un tal Pasión Gitana, torean en el coso de Insurgentes sin tener la más mínima idea de lo que es el toreo. Un simple capricho de alguien que quería tener el título de matador de toros y presumirlo ante sus amigos que seguramente estarán pasando por la llamada “pena ajena”. El ejemplo más claro de la ridiculez que hace pensar que hay manejos extraños al poner o “darle la oportunidad” a un caprichoso.
También hay toreros que llegan a la México que ponen a pensar si es que sus “triunfos” en otras plazas son ciertos. Esto sucede con Alejandro Amaya, Leopoldo Casasola, Mario Zulaica, etc.
Pero dejemos un momento a la Plaza México, ahora, a todo lo anterior se une la feria de San Marcos en Aguascalientes, México, en donde no aparecen los que de verdad triunfaron, tal es el caso de Humberto Flores que cortó tres orejas en la Temporada Grande; un triunfo que repercutió fuerte en la afición, pero curiosamente no en las empresas.
Hay carteles muy rematados en la feria de San Marcos, pero no hay oportunidades, si acaso dos, pero no más. Si, es bueno que se contraten figuras para darle realce a una feria de gran tradición e importancia, pero así, sin oportunidades de verdad, seguiremos sin ver una cara nueva que valga como torero.
