Nos decía aquel pensador argentino llamado Facundo Cabral, que las dictaduras le horrorizaban, pero que se le revolvían más las tripas cuando pensaba en la democracia puesto que, dentro de la misma pueden nacer dictadores disfrazados de demócratas.
Y le asistía la razón a aquel hombre genial que, generalmente sabía de lo que hablaba y al respecto, acertó como siempre hacia en sus predicciones. Fijémonos que las peores dictaduras nos las ha impuesto la democracia, ahí están todas las fuerzas políticas que prohíben la celebración de las corridas de toros mientras que el Tribunal Constitucional ha fallado a favor de la fiesta; es decir, sin que nadie descubra ahora las américas, los toros han sido siempre un espectáculo legal, aunque cuatro mal nacidos han querido destruirlo todo. Leí el otro día por ahí en que unas personas querían dar toros en Olot, y digo unas personas porque aquel pueblo está regido por especie difícil de encuadrar y, difícilmente cuando se da esta situación nada puede cambiarse.
Aunque parezca raro, un señor tal culto como Esquembre, ejerce en la política
Fijémonos hasta donde llega el grado de locura que, un simple alcalde aunque sea apestoso como casi todos los de izquierdas, tiene más poder que el propio Tribunal Constitucional y, ¿no será acaso que nadie tiene valor para aplicar las leyes y poner a la sombra a más de un maldito alcalde que no respeta ni el Tribunal Constitucional ni a sus propios convecinos?
Villena, sin ir más lejos, un pueblo regido por los verdes; bueno, por un tripartito de esos aberrantes como el que había en Alicante, el que rige en Valencia, etc. que, para dichos estúpidos, los aficionados a los toros no cuentan para nada cuando, como se sabe, Villena es la única plaza del mundo que, en la corrida que pueda darse por septiembre, se llena por completo; es decir, sobran aficionados por doquier en Villena para que los toros sean un éxito.
Pero no, un tal Esquembre, que así se llama el alcalde, amarrado por los huevos por sus compañeros de equipo, siguen denegando la plaza de toros porque argumentan que tiene deficiencias estructurales. ¿Se puede ser más malo en esta vida que el tal Esquembre? Eso sí, si se trata de algún que otro concierto de gentes afines a sus malditas ideas, la plaza está perfecta como ya lo han demostrado.
La plaza de toros de Villena, una joya al más alto nivel
Qué pena debe de sentir doña Celia Lledó cuando siendo alcaldesa de Villena reinauguró la plaza de toros que, como sabemos, era un solar desmantelado; todo un logro el que consiguiera la señora Lledó, algo que mal que les pese a tantos desdichados como ahora ejercen la maldita política que ellos llevan a cabo, como no la tiren al suelo, siempre estará ahí. Cuidado, no hablemos tan alto que estos pajarracos son capaces de todo.
Eso sí, buscando por Internet para saber quién era el tan Esquembre, pude leer un artículo sobre su persona que me congeló la sangre en mis venas. A un tipo que actúa así de sectario con sus convecinos que aman la fiesta de los toros, que saliera un tipo por ahí diciendo que Esquembre tiene todas las virtudes del mundo; que incluso, como médico, estuvo en Guatemala ayudando a los pobres de aquel país. No seré yo el que niegue esta afirmación, como las miles de lisonjas que le obsequiaba su “biógrafo”; algo descomunal que, tras leer aquello uno tiene derecho a pensar que la Madre Teresa, en su bondad, fue una graciosa al lado de Esquembre.
Es cierto que podía haberse quedado en Guatemala y seguiría haciendo el bien porque en Villena solo sabe hacer el mal. Por ejemplo, el año pasado se reunió con la Junta Festera en la que les quería prohibir que salieran animales en los desfiles villeneros a lo que la Junta le dijo que si no salían los animales lógicos de toda la vida, ya podía él empezar a programar la fiesta que, la Junta se quedaba al margen. Se acojonó y no tuvo valor para prohibir los animales en las celebraciones de las fiestas. Yo me pregunto una cosa, ¿este tipo estaría en Guatemala curando niños o perros? Él que diga lo que quiera, yo me inclino por los perros.
Esquembre debe estar atento porque ha llegado la hora del cambio y el 26 de mayo veremos datos reveladores en política, como veremos a estos cafres asquerosos y aberrantes quedarán fuera de los ayuntamientos. Habrá tripartitos en los ayuntamientos, pero de gentes decentes y lógicas que jamás desdeñarán la fiesta de los toros como ya se han pronunciado. O sea que con un poquito de suerte, que la tendremos, este año se dará la corrida de toros en Villena porque el dictador que ahora tienen se habrá ido a su casa o a Guatemala, a seguir curando enfermos que es donde debería estar.