La cogida mortal de Víctor Barrio habrá paralizado por unos largos momentos a la afición. Injusta. Tremenda. Angustiosa. Espeluznante. Nunca regresara el torero. Pero sigue el toreo. Con las buenas y las malas. Los que nos leen, y otros también, lo saben. Pero sigue la vida aunque esté la muerte.
Cayó el diestro segoviano en una plaza aragonesa, Teruel, históricamente más conocida en mi país por su dura Batalla durante la Guerra Civil que por su plaza de toros.
Y lo empitonó el toro Lorenzo de la ganadería local de Los Maños, de origen Santa Coloma, que tanto gustó en novillada en Parentis la pasada temporada y que ganó con su toro Salta Cancelas la corrida concurso de la mítica plaza de Vic-Fezensac el pasado mes de mayo. Gran toro y novillos bravos. Ovacionados de pie estos animales por la exigente afición torista gala.
De hecho, otros de sus ejemplares serán próximamente lidiados en 2 novilladas en Francia, nuevamente en Parentis, el sábado 6 de agosto y en la plaza de Bayona el viernes 2 de septiembre.
La tristeza por la muerte del torero se une también precisamente a esta ganadería aragonesa que tiene la desgracia de vivir esta terrible prueba como lo fue para Ana Romero, de cual un toro hirió gravemente a Padilla, y que compartía cartel en Teruel con Los Maños.Portada de la pagina web de la ganaderia de Los Maños
Los Maños, una ganadería y también un gentilicio que se aplica a los nativos de Aragón y que bien podría derivar de la palabra latina Magnus, que significa grande...
De eso se trata precisamente, de la grandeza del toreo, del toro y del torero, unidos en un mismo drama, en un mismo arte, el del combate de los toros o tauromaquia.
Lorenzo de Los Maños y Víctor Barrio... Por la grandeza y la eternidad.