Nadie podría bautizar mejor a la plaza de toros Monumental de Barcelona la que, como digo, ha definido el gran José Luís Cantos Torres en su inigualable trilogía de libros escritos al respecto de la singular plaza catalana, una joya que han matado los políticos catalanes, esencialmente la que reivindica José Luís Cantos con sus tres libros, para enaltecer la gloria que dicha plaza tuvo en el toreo.
Años atrás, como sabemos todos los aficionados, Barcelona era la plaza de temporada por antonomasia; es decir, en la Ciudad Condal se daban más toros que en ninguna plaza del mundo, llegando a superar a Madrid que era y sigue siendo el baluarte de la propia tauromaquia.
Cartel presentación del libro La Gran Dama de José Luís Cantos Torres
Ante ello, José Luís Cantos Torres ha querido inmortalizar para siempre la trayectoria bellísima y ejemplar del coso que más eco tuvo en el mundo de los toros, razón por la que durante diez años ha trabajado este hombre admirable en la confección de sus tres libros sobre la tauromaquia en la Ciudad Condal, reivindicando, la grandeza de la que él bautizó como LA GRAN DAMA, ahora, huérfana de todo y con sus puertas cerradas.
José Luís Cantos Torres hizo la presentación del tercer tomo sobre la Monumental de Barcelona el pasado sábado en Madrid, como no podía ser de otro modo, en la plaza de toros de Las Ventas, justamente, en la sala Antonio Bienvenida en que, la misma, abarrotada de aficionados pudimos gozar de la presencia y esencia de este autor catalán, un personaje singular que ama la fiesta de los toros como el primer aficionado de Madrid.
José Luís Cantos Torres, en la sala Antonio Bienvenida de Las Ventas
De Joaquín Bernadó a José Tomás, es el título que define su tercer tomo para hablar de LA GRAN DAMA, la plaza que nunca debió de cerrarse y la que José Luís define y defiende como nadie lo haría en el mundo. Una pena, como allí se dijo, que el maestro Bernadó estuviera ausente puesto que, una indisposición de última hora le impidió acudir a un evento que, lógicamente se hacía en su honor. José Luís fue presentado por Carlos Abella como maestro de ceremonias, todo un lujo el que pudimos disfrutar en tan cálida mañana de mayo.
Cantos Torres nos mostró en un formato audiovisual todo el complejo mundo de la elaboración de lo que han sido sus libros; nos contó anécdotas por doquier, nos paseó por la Ciudad Condal, conocimos a personajes insólitos, supimos de datos que de otro modo jamás hubieran sido posibles; todo un mundo de sensaciones las que guardaremos dentro de nuestro corazón.
La sala Antonio Bienvenida de Las Ventas abarrotada de gentes
Desdichadamente, los grandes medios de difusión de la tauromaquia no hicieron acto de presencia en tal magno evento; ellos son de otro mundo, dicen vender la cultura, es más, micrófono en mano o bolígrafo al uso, muestran su “cultura” al más alto nivel, pero cuando hay un acto verdaderamente cultural, por allí no aparece nadie; es decir, venden humo para que los ignorantes se lo crean.
De todos modos, allí estuvimos los cabales; la sala se llenó por completo y, como nos contara José Luís, acudieron gentes de toda España, personas comprometidas con la cultura que, sin duda, no van pregonando por los medios; acuden donde tienen que ir y cumplen con su cometido de aficionados y, lo que es mejor, como adalides de la cultura.
Gratitud de José Luís Cantos Torres ante la acogida que ha tenido su obra
Los que sabemos del inmenso esfuerzo que supone editar un libro sin que nadie te ayude, somos los que en verdad valoramos a personas como José Luís Cantos Torres que, como es lógico, merece todos los honores por su trayectoria, por su labor, por su difusión de la tauromaquia y, ante todo, para que LA GRAN DAMA, aunque ahora muerta en sus actividades, todo el mundo sepamos de la grandeza que ha supuesto esta plaza única en el mundo en la que, unos mal nacidos cerraron para siempre.
Mi gratitud para ti, José Luís Cantos Torres, un ejemplo de persona y un aficionado cabal.