A raíz de la polémica desatada en la capital de la República sobre la consulta popular que propuso el nefasto alcalde ex guerrillero, Gustavo Petro y que fue aprobado por mayoría en el Concejo de Bogotá, surgen ideas y posturas de los aficionados que abandonando su fiel compromiso como tales, esbozan  una serie de sugerencias tanto para los ganaderos de bravo como para quienes defienden de manera tan sensible la vida de los toros.

Toros de lidia en su habitat natural

La invitación a ecologistas, animalistas, defensores de animales y grupos anti taurinos que están en contra de las corridas de toros, es si lo aprueban las partes, la siguiente:

- Que los productos vacunos sean adquiridos mediante compra por los ecologistas, animalistas y defensores de animales como si fuese la empresa taurina que los adquiriera para ser sacrificados en una plaza de toros a los costos que considera el ganadero, valen sus ejemplares. Una temporada en Bogotá consta de seis corridas de toros y una novillada. (49 semovientes)

- Preservar la especie del toro bravo y para tal fin, ecologistas, animalistas y  defensores de animales,  deben adoptar como se adopta un perro o un gato, un toro de lidia ya que lo consideran como una mascota.

- Para tal fin y en consecuencia se debe contar con un amplio terreno que reúna las condiciones ambientales e instalaciones adecuadas con máxima seguridad para mantener al animal en su hábitat natural en condiciones óptimas de alimentación y sanidad hasta que muera de viejo, finalizando así su ciclo vital. De esta manera evitarían el sacrificio de la res en un coso taurino.

- Finalmente y tal como sucede con los animales domésticos, se debe adecuar un terreno exclusivo para darle bovina sepultura al animal en el momento en que este fallezca.

- Los trámites de adopción de la mascota bovina, deben quedar inscritos mediante un acta en la que se registre que el adoptante (ecologista, animalista, defensor de animales), se comprometa a la manutención absoluta del animal hasta el final de sus días.

- El compromiso de los ecologistas, animalistas y defensores de animales, deberá ser el de adquirir anualmente los ejemplares que van a la plaza de toros y salvarles de la muerte mediante los mecanismos antes anotados.

- Es indispensable un curso de manejo de estos bovinos por parte de los animalistas, ecologistas y defensores de animales, teniendo en cuenta que es una especie peculiar única en el mundo y requieren de cuidados más dispendiosos que los que pueden recibir otras especies, dada su condición genética.

-En materia económica y fiscal, se necesita el compromiso y concurso de los animalistas, ecologistas, defensores de animales y grupos anti taurinos para que anualmente le rindan cuentas al distrito por algo más de $5.000 mil millones de pesos que son invertidos en construcción y mantenimiento de parques en estratos 0, 1 y 2 de la capital colombiana, réditos que deja la fiesta brava en LA PLAZA DE TOROS DE SANTAMARIA, mientras no fue abusiva y arbitrariamente cerrada por el dictador Petro.

Dejamos la propuesta abierta y planteada tanto para los ganaderos como para los ecologistas, animalistas, defensores de animales y grupos anti taurinos que deseen sentarse en una mesa de diálogo a discutir pormenores y detalles del tema en medio de un ambiente de camaradería y respeto mutuo.