S.I.15.- Según se mire oiga. Esa sería la respuesta más escueta. En esta segunda de feria se puede uno hacer la pregunta y las respuestas podrán ir en una u otra dirección. Veamos.

En cuanto a público, y tratándose de un sábado, creo que era previsible algo más de público, pero se quedó más o menos como ayer, rondando los dos tercios, lo que representa aproximadamente el abono. Sin los nombres que suenan a la gente del clavel no va a mejorar en ese aspecto. ¿Y por qué no dice a los aficionados? Sencillamente porque quien es aficionado no se deja llevar por los nombres, le gusta asistir a los toros todos los días que puede, no selecciona por los nombres de los actuantes. Va y punto, de ahí lo del abono.

Donde si se mejoró fue en los toros. Hoy no hubo que sufrir la mansedumbre supina de ayer. Habiendo devuelto uno se ha salido un cuarto de hora antes, lo que significa que no se ha tenido que ir a buscar a los toros por toda la plaza para llevarlos al caballo. Y en esa suerte se mejoró también pues los picadores lucieron algo más que ayer, destacando Iturralde, de la cuadrilla de Ureña.

Pedro Iturralde puedo lucir, precisamente, porque hubo un toro que mejoró, y por mucho, lo visto ayer. ‘Agitador’ el precioso toro ensabanado de Fuente Ymbro borró por completo la corrida de ayer y la de muchos días. Bravo en el caballo, arrancándose de largo, alegre y embestidor, fue aire fresco, como decimos, en esta tarde y en futuras.

'Agitador' es el toro que enamoró a todos y por todo

Su matador, Paco Ureña, no estuvo mal, pero quizá tampoco a la altura de ese gran toro. Se vivieron pasajes, sobre todo por el pitón derecho, de auténtica emoción pero el torero lorquino estuvo mal con los aceros sin paliativos. El posible premio pasó de largo para él, si bien el toro fue fuertemente ovacionado en el arrastre. Aquí se afirma, sin duda alguna, que se mejoró.

Los toreros también pudieron lucir algo más, destacando El Payo con el capote toda la tarde, que no es poco, pero, al margen del citado Ureña, los toros se les apagaron pronto y no terminaron de elevar el tono de sus faenas. Jiménez con el peor lote, El Payo con el más potable y el citado Ureña con el mejor toro, todos fueron silenciados al término de sus trasteos. En cuanto al resultado no se mejoró lo de ayer.

Donde no se mejoró lo de ayer es en el uso de las espadas. Todas las estocadas fueron defectuosas, cuando ayer fueron bastante aceptables.

¿Mejoramos? Esa era la pregunta que me hacía en el titular y creo haber dado las respuestas. Mejor con el ganado, mejor el tercio de varas, mejores momentos con el capote y con la muleta y peor en la suerte suprema. Se perdió en el resultado para los toreros, ganó y salió con la cabeza alta el ganadero y los aficionados se agitaron mucho más en sus asientos, al menos mientras estuvo en la plaza ese precioso ‘Agitador’.

La tarde no se puede calificar de buena, pero mientras haya un toro bravo, siempre se agitarán las conciencias de los que creen que el toro es un secundario en esta obra y también de los que, por el contrario, piensan que esa es la esencia de esta Fiesta: El toro, sea de capa negra o un ensabanado como el de hoy, es el motivo por el cual ha de acudirse a una plaza si se es aficionado, aunque algunos piensen que no hay que ir por eso. Pero si a los toros no se va primeramente por los toros ¿a qué se va?

Si hubo, al menos, un toro, podemos afirmar que sí, que mejoramos.

Foto: Muriel Feiner