|
Hemos leído y releído y vuelto a leer, los carteles de la feria más importante del mundo; la de San Isidro en Madrid.
Son treinta y un días de festejos en los que, por lo que anuncian; estarán muchísimos españoles, lo cual es obvio. De entre estos, no estarán algunos que extrañaremos, pero, comprendemos que a la hora de hacer carteles; debe ser complicadísimo el dar gusto a todos.
Estarán franceses, portugueses, colombianos y varios mexicanos, algún peruano pero, en ese largo serial; ¡no se ha incluido, un solo torero ecuatoriano!
La afición taurina de Ecuador viene luchando con uñas y dientes por mantener viva la fiesta, multiplicando la actividad en aquellos lugares donde se mantuvo el respeto y la libertad de elección.
Los toreros, las cuadrillas, los aficionados; todos los taurinos de esta tierra maltratada por la intransigencia emanada del más alto poder, luchamos cada día una batalla encarnizada contra todo y todos los que se oponen a una pasión cultural que lleva arraigada en el país, prácticamente desde la conquista española.
Desde lo más profundo del alma, nos alegra la presencia de todos esos toreros latinoamericanos a los que SI, se les ha dado la oportunidad de estar en las ventas. ¿Qué tenemos algo de envidia, sana pero envidia al fin? ¡indudablemente!; pero eso no es obstáculo, para desearles la mejor de las suertes.
Treinta y un días de toros son muchísimos días y de entre tantos: ¿no podía quedar un espacio, para un torero ecuatoriano?
Sebastián Castella y David Fandila, “El Fandi” estuvieron aquí, apoyando la defensa que los taurinos pretendimos hacer de la fiesta, antes de que la mutilaran por “decreto”. Ellos saben la afición y el amor a la profesión que tienen los toreros ecuatorianos.
Todos aquellos toreros españoles, franceses, mexicanos que pasaron por la antes conocida y bien reputada Feria Jesús del Gran Poder, con seguridad recordarán las ansias, esperanzas y voluntad de torear que tenían los toreros de esta tierra.
Pues esas ansias, esperanzas e ilusiones siguen intactas, luchando por hacerse un hueco en los pocos festejos que se dan en el país y soñando con tener alguna oportunidad fuera de él.
Los toreros, sin importar su origen; son por definición: luchadores y todas las trabas que han ido acumulándose en contra de la Fiesta Brava, lejos de arredrarlos, han sido un acicate para buscar caminos que les permitan seguir haciendo lo que aman: TOREAR.
Ahora bien, nos preguntamos: ¿a la hora de estructurar los carteles para la feria este año, se les olvidó que Ecuador también es tierra taurina, que en este país hay toreros que luchan contra todas las adversidades por mantenerse en su profesión?
Leyendo todas y cada una de las distintas fechas, solo echamos en falta un nombre ecuatoriano, sea de a pie o de a caballo, en corrida o en novillada.
Iniciamos este artículo con el título de injusticias de San Isidro y lo sostenemos. Porque, puesto que todo el orbe taurino está representado en esa tan extensa Feria de San Isidro, la ausencia de un representante ecuatoriano es una injusticia.
¡Se ha dado cabida a todos los países taurinos y a Ecuador se le ha dejado de lado como si no lo fuera!. ¿No es esto una injusticia?.
|
