Con la novillada inaugural de la feria de Bucaramanga, se da inicio a una nueva temporada taurina en Colombia.
Por supuesto las ilusiones se renuevan y los aficionados, ávidos de toros, alistan sus avíos para asistir a las plazas. Nosotros alistamos la pluma para el cubrimiento de lo que acontezca en estos tres meses en los ruedos colombianos.
Una temporada que arranca y que esperamos, como siempre, con el deseo de que suceda lo mejor pero con la ilusión de recuperar a cada momento la verdad de la fiesta. Así estamos.
Ilusionados con que salga el toro íntegro y con la edad que corresponde a un toro.
Ilusionados con que además de esto, salga un toro encastado, con fiereza, que permita el lucimiento del torero pero siempre trasmitiendo emoción y no con borreguitos que pasan como un carretón sin peligro ni raza.
Ilusionados con el regreso de “Mondoñedo” a Bogotá para poder observar el toro-toro en su versión colombiana.
Ilusionados en que si se conceden indultos sean de verdad, a toros que lo merezcan, a toros con casta, que acudan con codicia al caballo y vayan con calidad a la muleta.
Ilusionados estamos con la primera fila de toreros colombianos liderada por Paco Perlaza y Diego González que tienen que demostrar que pueden estar, no solo en las ferias colombianas sino en todas las de América y las de Europa.
Ilusionados con Cristóbal Pardo para que ratifique todo lo que ha mostrado en el Perú y que sus ganas y condiciones atléticas entusiasmen al público. Esperando también que Ramses, en la única oportunidad que tiene, y con los leones de “Mondoñedo”, no se estrelle y nos deje ver de nuevo el salero y la gitanería del año pasado en Bogotá.
Ilusionados con que le den paso a Sebastián Vargas, pero paso de verdad, porque de los veteranos es el que merece estar anunciado en todas las ferias colombianas.
También ilusionados con esa plantilla de excelentes subalternos que hacen el paseo en todas las plazas de nuestra geografía, desparramando torería y profesionalismo.
Obviamente ilusionados con el maestro de maestros, César Rincón, en una temporada americana más, en la que viene con vitola ya no de figura sino de maestro reconocido y consumado. Esperando que nos muestre algo parecido a lo de Sevilla y Nimes.
Ilusionados con Luis Bolívar porque vamos a descubrir que tiene adentro y a recuperarlo para la temporada europea 2005.
Ilusionados con la celebración del cincuenta aniversario de la feria que hizo las ferias en América, la feria de Manizalez, que a pesar de no haber confeccionado los mejores carteles para tal ocasión cuenta con una nómina interesante de toreros y con el duende de su plaza.
Ilusionados con la segunda temporada en Bucaramanga que esperemos ratifique lo experimentado el primer año y se consolide como la feria de apertura de la temporada colombiana.
Ilusionados también con Cartagena, que a punto estuvo de no dar la feria pero que gracias a la afición de prestantes ciudadanos de “la heroíca” - esta vez ellos fueron los héroes - se pudo salvar y habrá toros.
Ilusionados con Cali que busca de nuevo su rumbo y que ha subido la calidad de sus carteles, sin llegar todavía a lo de antaño.
Ilusionados con Bogotá que confeccionó los mejores carteles de toda América.
Ilusionados con Medellín y su nueva plaza de toros con cubierta movible.
Ilusionados con Duitama que se acomodó como una feria grande más, en el circuito taurino nacional.
Ilusionados con la presencia de Enrique Ponce y “El Juli” para que ratifiquen que son las máximas figuras del toreo en la actualidad.
Ilusionados con “El Cid”, el torero que interpreta el toreo más puro de la actualidad.
Ilusionados con los novilleros que han podido mostrarse en todas las ferias de novilleros celebradas en lo corrido del año y ahora vienen a su prueba más dura.
Ilusionados con la afición creciente al rejoneo que tiene su cita en cada feria, con jinetes de Colombia y Europa.
Ilusionados con que los presidentes de cada corrida apliquen un criterio igual para todos los toros y toreros sin importar nacionalidades y categorías.
Ilusionados con que la afición acuda masivamente a todas las ferias y que disfruten con la verdad de la fiesta y esto repercuta en que esta crezca más y más.
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