Es un carácter anímico de condición temperamental y apreciación subjetiva, hereditaria y depurada por la selección, que se manifiesta por el impulso de acometer resuelta y constantemente un objeto que ha sobrepasado la distancia critica de provocación.
La bravura no tiene medida, si no es en la lidia, pero está condicionada al torero, que no siempre es buen lidiador. La técnica de lidiar reses bravas ha progresado infinitamente más rápido que la mejoría en la bravura de los toros. Así aunque los toros de ahora son indudablemente más bravos que los de antes y llegan muchísimo más enteros a la muleta, pues casi no los pican, los toreros actuales no solo pueden con ellos, que es la base del toreo, sino que los hacen faena a casi todos.
- La bravura puede estar influenciada por varios factores:
a) Por el temperamento
b) Estado físico del animal o sea el poder
c) Conjunto de factores adversos.
! Medio ambiente hostil
! Peso, transporte, ruedo, condición metereológica, decisión de los toreros.
El estilo para embestir es lo que se aprecia y traduce al exterior, son los signos externos de la bravura y por lo que la evaluamos. Tiene por último una escala acondicionada a la resistencia al dolor lo que llamamos grados de la bravura clasificándose en (blandos, bravos y duros).
La primera condición exigible al toro es que sea bravo, pero hay que partir primero de que sea toro. La bravura es un carácter básico esencialmente fundamental y alrededor de ella gira la fiesta. La bravura de un toro se puede manifestar dentro de ciertos límites y puede ser que el día de su lidia no esté en vena, hay una diversidad de razones que se pueden clasificar como imponderables, pero otras son perfectamente conocidas como:
- Las características de pelea varían con la edad, hasta el punto de llegar a ser de signo contrario.
- Algunos toros salen difíciles, broncos y poderosos, lidiados de becerros son fáciles, suaves noblotes o al revés algunos cuando cuajan.
- Como regla general siguiendo un proceso natural, los jóvenes resultan juguetones, inquietos, pelean desigualmente, y parecen todos tener temperamento y alegría sin ser demasiado pastueños.
- Más adelante adquieren formalidad y aplomo y llegan al máximo de la nobleza, no dan carreritas en balde y procuran reservarse para no gastar fuerzas.
Considero que existan diversas razones para discutir este tema de la bravura, entre ellas:
1) Los asistentes a las corridas en muy poca proporción saben lo que es bravura.
2) Una gran mayoría de espectadores creen que el toro es bravo cuando el torero está bien.
3) Se cree que hay varios tipos de bravura (para el ganadero, para el torero, en la muleta, en varas, etc.)
4) El concepto ha evolucionado a través del tiempo y es muy subjetivo, no habiéndose unificado criterios, por lo que a unos parece bueno lo que a otros no.
5) Muchos criadores son empíricos en cuanto a labores de manejo y selección lo que las hace actuar profanamente pero no técnicamente.
6) Los mismos profesionales del toreo equivocan o desconocen sus características por eso incluso los más afamados nunca han sobresalido como ganaderos
7) No existe protección oficial (Registro genealógicos, unificación de operaciones de manejo, tablas de medida de bravura etc.)
La bravura como ya hemos dicho es un carácter anímico que no se puede medir físicamente como los litros de leche, largo de un vellón, de kilos de carne; ni ver como el color de pelaje.
Por eso debe tenerse muy presente que la crianza del toro de lidia representa una especialización zootécnica de la economía pecuaria y que en su explotación deben seguirse normas muy prácticas genuinamente especificas y perfectamente orientadas al fin perseguido, y el no considerar esta situación es una de las mas grandes dificultades que atraviesa este tipo de ganadería..