Es un honor para nosotros contar con él para la próxima "División de Opiniones", un orgullo tener al mítico crítico taurino, Alfonso Navalón Grande, en nuestro portal. Esta sección, que queremos que sea un puntal de la web, le tendrá el próximo día 15. Pensemos que, Navalón, de vuelta ya de todo en la vida, viviendo su espléndido otoño dorado en su apasionada existencia, nos regala el inmenso lujo de su pluma para que, www.opinionytoros.com sienta la responsabilidad que entraña el hecho de poder tener, aunque sea de forma ocasional, una pluma de tanto prestigio a nivel mundial.
El tema que le propusimos a Navalón, como es lógico, no podía ser otro que, LA PRENSA Y LOS TOROS, justamente, de su parte, desgranar lo que ha sido su apasionada vida como periodista en el medio taurino. Como entenderemos, el tema da para mucho y, con toda seguridad, nadie como Alfonso Navalón para desarrollarlo en profundidad. Una pena que, los años, han cansado a Navalón; los años y, sin lugar a dudas, esa guerra particular que ha sostenido contra todos, de la cual, sin duda alguna, ha salido triunfador.
Debatir, ante todo, ha sido la constante de Alfonso Navalón en su ya larga vida como periodista y, en esta ocasión, no podía ser una excepción. Debatir, divulgar, enseñar y exponer las constantes vitales de una fiesta adulterada y maltrecha, han sido las formas y maneras de Navalón que, desde el foro donde se ha pronunciado, ha llevado a cabo con orgullo y dignidad.
Ahora, como un gran lujo para nosotros, Navalón, desgrana con acierto y rectitud, el momento actual de la fiesta; digamos que, las formas en que anda ahora sumido el periodismo taurino en su élite en que, salvo muy pocos, la basura y la prostitución de las plumas más relevantes, son el punto de mira de un periodismo que, por dinero, ha quedado mutilado en su verdad. Quedamos los románticos y, Navalón lo sabe, por ello ha accedido a nuestro ruego que, no era otro que el de todos los aficionados del mundo.
Como podremos comprobar, nuestras secciones, se irán nutriendo de forma periódica y abordaremos todos los temas más vitales de la fiesta, siempre, bajo la tutela de alguna autoridad en materia que, a no dudar, harán importante la división de opiniones. De mi parte, era lógico que, contento y feliz, anunciara a nuestro invitado que, con el orgullo propio del periodista auténtico, no ha dudado un instante en escribir algo fantástico para nosotros. Les puedo asegurar que, a pesar de los años, Navalón no ha perdido su frescura, ni por supuesto, su sentido honrado por la fiesta. Me subyuga el Navalón que siempre conocí y que, ahora, una vez más, con datos en su poder, con hechos constatados, nos da nombres y apellidos de todos los que, del fraude, hacen un modo de vida y que, para colmo, se llaman periodistas taurinos. El próximo día 15 tendrán ocasión de comprobarlo.
