En algunas semanas, al menos 3 toreros acaban de anunciar que se retiraban del toreo. Primero, la novillera (o) Francesa Maria Barceló de la escuela taurina de Arles decidió a quitar la profesión.
El domingo pasado, el torero de Albacete Abraham Barragán decidió después de la corrida de Illescas cortarse la coleta. Conoció una alternativa triunfal en su ciudad cortando 2 orejas a su segundo toro de la tarde de la ganadería de Torrestrella. Fue el triunfador del bolsín de Ciudad Rodrigo, salió ovacionado de la plaza de Las Ventas varias veces, 51 corridas de toros al final en su carrera y ahora tiene en su pasaporte Matador retirado.
Desde el mes de noviembre de 2007, la situación del matador de Arles Julián Miletto era muy complicada. Oficialmente, Robert Margé, igualmente director de la plaza de Beziers se cuidaba de la carrera del francés pero en realidad, estaba buscando un apoderado. Al mes de enero, tuvo suerte encontrar una persona del mundillo taurino muy importante que le había previsto la confirmación en Madrid, algunos contratos en España en varios pueblos, un cartel fuerte en Nimes durante la feria de Pentecote y al final el 8 de febrero, anunció él también su retirada del toreo. En 2007, cortó una oreja en Arles, una en Beziers y 2 en Toulouse, 11 festejos al total pero ahora tiene en su pasaporte Matador retirado.
Existe muchos aficionados que le gustan los toros pero pocos pueden ir cada semana en los tendidos. Existe muchos matadores pero pocos pueden vivir de sus oficios.
Que sea Barceló, Barragán, Miletto y los demás, para llegar a vestirse de luces y tomar la alternativa, fue un trabajo enorme para todos que merece el respeto. Muchas personas intervinieron para ayudarlos como los ganaderos para tentar, las escuelas taurinas, los amigos, los apoderados, los hoteles que a veces proponer precios baratos para los jóvenes y mucho más. Como en cada actividad, hay que invertir al principio y solo el futuro puede decir si vale la pena…
Mas allá de la retirada, la pregunta es ¿Cuál es el futuro para estos toreros?
Antes de la anuncia de sus retirados de los ruedos, estaban firmando autógrafos, tenían muchos amigos y en un día, pierden todo… Es desgraciadamente la realidad.
Para los mejores, quedan en el mundillo taurino en calidad de banderillero, otros como apoderado o revistero pero para la mayoría, solo quedan los recuerdos del mundillo taurino en las cabezas y estos toreros retirados vuelven como cualquiera persona. En realidad, no estoy seguro de lo que estoy diciendo porque los toreros retirados tienen una ventaja gigantesca que muchos aficionados como yo que critican los toreros no tenemos…
Solo ellos conocen el olor del toro en el ruedo…
Solo ellos conocen la sensación de lidiar un toro…
Solo ellos conocen la presión de torear en una plaza…
Solo ellos conocen el momento único del triunfo frente al público…
Quedan toreros por la vida...
Escribiendo este texto, yo no me juego la vida…