Ayer, 27 de octubre del 2002, será un día inolvidable para nuestro compañero y amigo Pla Ventura puesto que, en tan celebrada fecha, tuvo lugar el estreno mundial del pasodoble que lleva su nombre. El evento tuvo lugar en la ciudad de Alicante con la Banda Sinfónica Municipal que, dirigida por su titular, el maestro Bernabé Sanchís, en el Auditorio de la Explanada de la ciudad de Alicante que, bañada por el mar Mediterráneo, fue testigo de tan digno acontecimiento.
La historia de esta pieza musical nació del corazón del maestro Vicente Ivorra que, habiendo sido, durante 27 años, el maestro de Pla Ventura en su etapa como clarinetista, no dudó, por razones de amistad, en sorprenderle con esta bella pieza escrita en su honor y, como no podía ser de otro modo, con aires taurinos, no obstante, como todo el mundo sabe, Pla Ventura, además de crítico taurino, en un aficionado cabal, como sus crónicas, entrevistas y libros nos han demostrado.
Cien profesores, bajo la batuta de Bernabé Sanchís, dieron un recital artístico musical a lo largo del concierto, interpretando, entre otras piezas, la obra Bilitis, la música de la película del mismo nombre; El Cantar del Arriero, la zarzuela del maestro Díaz Giles; la jota Mora de Rubielos, del propio maestro Bernabé Sanchos; La Marcha de Cádiz, otra zarzuela del maestro Valverde. Y, como final del concierto, el pasodoble Pla Ventura, cuyo honor recayó en la persona de Vicente Ivorra Pujalte, compositor del mismo, al cual, Bernabé Sanchís, le cedió la batuta para que dirigiera la obra de su creación.
El auditorio de la Explanada, repleto de público, estalló en aplausos durante todo el concierto y, tras la interpretación del pasodoble Pla Ventura, bajo la batuta de Vicente Ivorra, acto que causó sorpresa en el público allí congregado, puesto que, lo propio y lógico, hubiera sido que dicha pieza la hubiera dirigido el titular Bernabé Sanchís que, en un gesto que le honró, invitó a Ivorra para que dirigiera su propia pieza creativa.
Allí, entre tantos asistentes al concierto, pudimos divisar a Pla Ventura que, seguramente emocionado, contemplaba como, gracias a la música, el lenguaje eterno, su nombre quedaba inmortalizado para siempre. Ya, finalizado el concierto, pudimos saludar a Pla Ventura que, en gesto de gratitud, se acercó a los maestros para fundirse con ellos con un memorable abrazo.
GREGORIO DE ROSARIO.