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Con un tercio de entrada se han lidiado novillos de Zacarías Moreno, desiguales de presentación y de buen juego. El 5 bis con el hierro de Los Chospes, mal presentado, sin codicia.
Jesús Chover: Palmas y Silencio tras aviso
Toñete: Ovación y Saludos
Diego San Román: Saludos y Oreja. Diego San Romásn mostrando el trofeo conseguido. Foto: Plazavalencia Interesantísima novillada la que se ha celebrado esta tarde en la plaza de toros de Valencia. Los utreros de Zacarías Moreno han estado a punto de marcharse todos al desolladero con las orejas puestas a pesar de su calidad y grandes posibilidades de triunfo, siendo aplaudidos en el arrastre tres de los cinco lidiados. En el último ejemplar, el mexicano Diego San Román ha logrado el único apéndice en el que sin duda alguna ha sido un festejo en donde los astados han estado por encima de la terna.
Y es que el de Querétano ha entendido a la perfección a un novillo que ha desarrollado bravura y entrega, embistiendo por derecho por ambos pitones, queriendo coger los trastos con acometividad. Su matador ha iniciado la faena con un pase cambiado en la boca de riego para posteriormente recetar series de derechazos llevando cosido al animal que se desplazaba con buen tranco. Asentado y con cadencia a diestra, aunque la mejor tanda ha sido una de naturales rematando con el de pecho de pitón a rabo. En el epílogo ha demostrado que también tiene valor, acortando las distancias y metiéndose entre los pitones. Ha pasaportado al animal de pinchado y gran estocada que le ha servido para tocar pelo.
Su primero, un novillote de 410 kg, impropio de esta plaza, protestado de salida, ha sido todo nobleza y movilidad. Comienza el trasteo de hinojos toreando en redondo, siguiendo la muleta con clase, siendo desbordado por momentos al no perderle un paso, puesto que el astado quería distancia y Diego San Román quería ligar las series sin enmendarse. Al pinchar por partida doble antes de la estocada le ha privado de obtener algún trofeo. El de Zacarías ha sido fuertemente ovacionado.
Jesús Chover ha salido a por todas recibiendo al que abría plaza a portagayola. Coloca al novillo ante el varilarguero con chicuelinas al paso. Dos grandes puyazos de Jaime Soro en toda la yema dejan al novillo en dulce para el último tercio. Chover le exige mucho bajándole la mano en series largas y mandonas. Humillación y fijeza son las virtudes del animal, que tiene un buen pitón derecho. El valenciano ha fallado en la suerte suprema, propinándole un bajonazo que no merecía la faena.
El cuarto ha sido un toro en toda regla, veremos algunos con menos trapío en las corridas venideras. Lo saluda Chover con dos largas cambiadas. Pronto y metiendo riñones en su cita con el del castoreño. Buen tercio de banderillas destacando el par de la moviola y el último al quiebro, ajustadísimo. De rodillas pegado a tablas, muy valiente, inicia una faena que incomprensiblemente no ha cogido vuelo por falta de acoplamiento. Tras atascarse con los aceros ha visto silenciada su obra, siendo el novillo ovacionado en el arrastre.
Toñete se ha enfrentado en primer lugar a un serio novillo al que de forma torerísima, flexionando la pierna contraria ha acariciado sus embestidas, pero ante el que le ha faltado conexión con los tendidos al torear excesivamente despegado. Algún pasaje estimable al natural para acortar distancias y emanar buena doses de valentía. El novillo mereció mejor trato.
Al lastimarse el quinto ha salido un sobrero de Los Chospes, acarnerado, feote, y de pocas posibilidades. Se ha movido el animal pero le ha faltado casta. Algún natural estimable y poco más. Sin duda alguna, el gran triunfador de la tarde ha sido el Ganadero, que ha enviado un encierro de gran clase y que ha gustado mucho a los aficionados. Enhorabuena.
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