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Ayer sábado 9 de junio falleció la torera peruana Violeta Siuchong Pereda quien usó el remoquete de "Violeta Pereda" por la dificultad de su apellido paterno de origen asiático para ser usado en el mundo de los toros por el apellido materno, toreó en la década de los años 50 y 60, con gran éxito. Dejó de existir físicamente a los 88 años. En algunos carteles y medios de prensa se le conoció como “La China Torera”.
 Violeta Suichong Pereda "La China Torera"
 Violeta pereda en la Santamaría de Bogotá
Violeta Siuchong Pereda falleció en la localidad de Nazca, departamento de Ica (al sur de Lima), sufrió una lamentable enfermedad que la aquejó por más de un año. Sus restos mortales están siendo velados en la ciudad de Nazca, para que éste lunes 11 de junio (10 a.m.) serán trasladados sus restos a la Capilla de la Plaza de Toros de Acho (Lima) donde acogerá un merecido homenaje, recibiendo su póstuma vuelta al ruedo, luego será trasladada al Campo Santo de Mafre de Huachipa (Lima) donde será cremada. Esperamos la asistencia de sus familiares, aficionados en general, amigos y compañeros de profesión para darle el último adiós a la pundonorosa torera nacional.  El adiós a una gran persona como fue Violeta Pereda
PARA MI MADRE AMADA "VIOLETA"
La armonía de la vida se concentró en tu vientre, formando mi ser con tu inagotable amor de madre. Nací bajo el manto de la tierna protección de tus manos, ayudándome a levantarme de mis caídas con tus sonrisas.
Me acunas con tu melodiosa voz secando con ellas mis lágrimas y cuando sonrío soy yo, quien seca tus lágrimas de amor.
Para ti, siempre seré única, aquella que creció en tu interior, la criatura que alimentaste con tu sangre y tus sueños la hija por quien te sacrificaste vendiendo tus ilusiones a la vida, a cambio de mi felicidad.
El tiempo sembró en tu cabello hermosas canas y las arrugas van marcando bellos senderos en tu divina cara.
Madre, que Dios bendiga la inmortalidad de tu alma, porque yo tu mortal hija solo puedo amarte entregándote mi corazón forjado por tu sangre.
¡Gracias por darme la vida y hacer de mi un ser especial y digna de ser tu hija!
¡Te amo madre mía!
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