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La séptima de abono fue cuesta abajo, apenas unas ovaciones para David Mora y Juan del Álamo, en una tarde de nubes y claros, bajando nuevamente el termómetro, al final del festejo había que abrigarse por el fresquito, algo parecido sucedió en la arena venteña, ya que poco tuvimos que ver, las faenas de ninguno de los tres alternantes alcanzaron mérito alguno, ante los toros de Las Ramblas, al final el aburrimiento hizo presa en los tendidos, ¿por culpa de quién?, de ambos dos, dice el refrán que si uno no quiere dos no se pelean y eso es lo que sucedió en la tarde de hoy, en que toreaban: Un torero madrileño apreciado por estos lares como es David Mora, el salmantino Juan del Álamo y el extremeño José Garrido, ante cinco toros de Las Ramblas y un sobrero 4º bis de José Cruz.
Nuevamente un error garrafal del palco presidencial, al devolver indebidamente el cuarto toro de tan desastrosa tarde; ¿el por qué?, simplemente por manso. D. Antonio Bienvenida, decía, todos los toros tienen su lidia hasta los mansos, esto suele suceder en las de tercera o en las plazas del otro lado del charco en que si suele ser habitual.
Los cinco toros anunciados, cinco lucieron capas en castaño en diferentes tonalidades, bien presentados con cornamentas astifinas y ofensivas, con cuajo, pero con demasiados kilos sobre sus lomos, la media fue de 570 kilos y de juego desigual, tres con palmas en el arrastre y dos con silencios, el sobrero, también obtuvo palmas, con estos mimbres poco buenos cestos se podía hacer, por ello, el resultado, apenas saludos de dos alternantes y pare usted de contar.
 Mora con el primero de su lote. Foto: Plaza1 De primero un toro con 600 kilos para el madrileño David Mora, que saludó al morlaco con tres verónicas ejecutadas con suavidad y elegancia. Sin probaturas inició labor muleteril por el pitón derecho en dos tandas cortitas de buen corte, lo mismo sucedió con la mano contraria, pero no llegó a los tendidos, no estuvo mal el epílogo y mató de un espadazo hasta los gavilanes que fue más que suficiente para pasaportarlo. Fue ovacionado saludando desde el tercio. Con el sobrero de Cruz, un toro cinqueño, huidizo y correoso, nuevamente se lució por verónicas; con la muleta a más fue con pases templados por el pitón derecho, también templó los naturales, los pases fueron excelentes, las palmas no se hicieron esperar, buena fue la actuación del madrileño.
Un toro alto y largo era el primero del lote de Juan del Álamo, que lo recibió con un ramillete de verónicas acompasadas rematadas con tres medias estupendas. Bien cubrió el segundo tercio Jarocho, teniendo que saludar. Jenuflexo inició labor por el pitón derecho, tres redondos con buen son aunque perdiéndole pasos, la segunda tanda ligada y buenos los remates, que se aplaudieron con fuerza, con la otra mano, un natural destacable, pero menos lucido, por los aires voló Juan, tras la voltereta la labor bajó en intensidad. Manoletinas de postre que llegaron a los tendidos. Con el alfanje primer recadito del Usía, luego una estocada entera en buen sitio que fue sufí. Ovación con saludo. Manso y escarbando fue su cuatreño segundo, con la capa nada y con la franela le molestó demasiado el viento fuerte de ese momento, pese a ello supo hacerse con el bicho con interés, con la zocata ejecutó naturales con buen son, yendo a más su quehacer con pases despaciosos. Tampoco estuvo mal con la toledana colocada en lo alto. Saludó desde rayas.
Un toro serio pero escarbando fue el tercero de la tarde al que José Garrido, le saludó con el percal que tuvo su enjundia, la última y como cierre rodillas en la arena. Tirando hacia las afueras empezó labor con la pañosa y por el pitón zurdo en buen tono, como también fueron los redondos y palmitas al canto, la labor fue de más a menos, con buen criterio a por la espada de verdad, matando al cuatreño de entera algo desprendida que acusó el burel echándose. Silencio para el extremeño. Con el sexto, nada con el percal; banderazos de inicio con la sarga y de uno en uno los pases diestros sin lucimiento alguno. Le tocó los costados para cuadrarlo y estuvo poco acertado con las armas toricidas. Silencio.
Corrida de poca historia, ya veremos lo que pasa mañana martes.
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