|
Con un cuarto de entrada se ha celebrado la corrida que cierra temporada en Las Ventas. Se han lidiado toros de Salvador Gavira, de distinto juego.
Daniel Luque, ovación y oreja tras aviso
Sebastián Ritter, silencio tras dos avisos y vuelta
Javier Jiménez, silencio y silencio tras aviso. Luque muestra el trofeo conseguido. Foto: Plaza1 Tras siete meses de actividad taurina en la capital del reino, en el día de la Hispanidad 12 de octubre del año de gracia de 2017 y con la nueva empresa liderada por Simón Casas, se ha echado el cierre de éste su primer año como gestor. En mi crónica anterior, decía que esperábamos que el cierre fuera con broche de oro. Pero desafortunadamente no ha sido así y el broche ha sido más bien de un metal inferior, fue un broche más bien de plata, ya que la última oreja de la temporada la cortó el torero sevillano Daniel Luque, el colombiano Sebastián Ritter dio una vuelta ruedo y hubo la presentación tomando antigüedad la ganadería de D. Salvador Gavira García, completaba el cartel el otro sevillano. Javier Jiménez que ya ha triunfado en este coso.
Fue una pena que un festejo tan emblemático como este, acudiera tan escaso público, cosa que años ha, esto no sucedía, muchos años atrás, la plaza se llenaba, por ser un día festivo en medio mundo conmemorando la gesta del descubrimiento de América, pero como todo cambia hay que adaptarse a los nuevos tiempos.
Los toros de D. Salvador, excelentemente presentados con leños por pitones, bien rematados, nobles en sus embestidas con cierta raza y casta, que quizás en otras manos el resultado hubiera sido distinto, pero vaya por delante una felicitación a D. Salvador por el envío de esos pupilos y que esperemos aún le salgan mejores. El resultado ha sido: Silencio para el que abrió plaza, palmas para el segundo, silencio para el tercero, pitos injustos para el cuarto, palmas para el quinto y silencio para el que cerró festejo.
El torero que abrió esta última corrida fue el nacido en Gerena, Daniel Luque, bien en el saludo capotero, iniciando faena con tres estatuarios de buena ejecución, ya en las afueras, no estuvo mal con la franela, mejorando aún con la zurda el remate fue con un largo forzado de pecho, recortes vistosos como colofón sumando unas bernadinas apretadillas que se aplaudieron, terminando con un espadazo en el hoyo doblando sin remedio el cuatreño, tras las palmas, el andaluz saludó desde las rayas. Lo mejor de su actuación llegó en el cuarto, al que toreó con garbo con la muleta por ambos pitones, acortó distancias y el resto de su quehacer tuvo valor añadido dada las miradas aviesas del bóvido, abrochó su excelente labor por luquecinas y la ovación para el sevillano tras el desplante torero. Con el acero de verdad dejó una media estocada arriba que surtió efecto. Aparecieron los albos moqueros en todo los tendidos y el presidente otorgó la oreja.
Un buen toro y con calidad le tocó al de Medellín Sebastián Ritter como primero de su lote al que saludó con una buenas verónicas que se aplaudieron con fuerza. Tomó la pañosa iniciando faena con pases por alto para continuar con redondos diestros de buena calidad yendo a más su labor por ese pitón al punto que escuchó una ovación, buena actuación del colombiano, esa labor la emborronó dos golpes de verduguillo. Silencio para el de Medellín. Mejor fue el saludo con el percal con tres verónicas mecidas al quinto. En torero estuvo con la muleta desde el inicio, una tanda en rayas con la diestra, los naturales llegaron a los parroquianos, retornando a la diestra en que destacaron tres redondos, cuando nuevamente quiso torear con la zocata al tercer pase fue cogido espeluznantemente, todos creímos que el toro le había calado por la boca del estómago, pero la cosa no fue a mayores, el colombiano sacó raza y valor, siguió labor, llegando un desplante valentísimo sin los trebejos en las manos ante los leños del animal. Se enfrontiló para despacharlo dejando un estoconazo del que salió el cuatreño sin puntilla. Pañuelos ya lo creo que los hubo, pero tras contabilizarlos el Usía no concedió el apéndice pedido y el de Colombia dio la vuelta al ruedo, eso sí con ligeras protestas de los de siempre.
El que no tuvo suerte esta vez en el sorteo matutino fue el torero de Espartinas Javier Jiménez, de su lote, el tercero de la tarde primero de los suyos, lo saludó con lances a la verónica que fueron aplaudidos. Tras el tercio de banderillas y fuera inició faena por naturales de buen corte, cambió de mano y la faena fue a más pero no hubo transmisión, creo francamente que estuvo discretito en su quehacer, pases y más pases, algún detallito y pare usted de contar. Con la toledana dejó una estocada entera en buen sitio que acusó el animal, siendo rematado con certero descabello. Nada vimos con el percal en el que cerraba corrida y temporada, con la roja franela lo apreciamos más bien sin fuste y algo anodino pese a que voluntad no le faltó. Tampoco estuvo acertado con las espadas, pero al final le metió la mano para dejar tres cuartos de estoque que hicieron daño al cuatreño que dobló sin más, rematando el puntillero.
Así acabó el último festejo de la temporada. Espero haber cumplido un año más con todos vosotros y si Dios quiere os espero el año próximo en este mismo portal, que paséis un buen invierno son los deseos de este junta letras.
|
|