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Con un cuarto de entrada se han lidiado novillos de Guadalmena, de buen juego en conjunto.
Ángel Sánchez, oreja
Álvaro García, oreja
Emilio Silvera, oreja
Alfonso Cadaval, oreja
Carlos Ochoa, oreja
Marcos, oreja. Ángel Sánchez (en foto de archivo) fue el primero en pasear un trofeo
Es una pena ver tanto cemento en los tendidos de una plaza, hoy sin ir más lejos en el cierre de la feria taurina de Sanse apenas habría un cuarto de entrada, eso sí un público festivo y generoso, premió a los jóvenes novilleros con apéndices, todos los actuantes se llevaron una peluda por coleta tras sus respectivas actuaciones.
Los utreros de Guadalmena justos de presentación para una plaza de tercera categoría como es el coso de Sanse, eso sí con poca arboladura y fuerzas justas, por ello el mono puyazo toda la tarde, el novillo que más empujó y que estuvo a punto de derribar fue el sexto. Eso sí fáciles de torear y de allí el resultado de seis orejas.
Abrió plaza Ángel Sánchez que de entrada estuvo lucido con el percal, tanto en las verónicas de saludo como en un quite por chicuelinas tras el mono puyazo, con el trapo rojo, estuvo en novillero pero toreando bien por ambos pitones, demostrándonos que está toreadito y que tiene maneras, despachando a su “enemigo” con una estocada que penetró tres cuartos de estoque en buen sitio, por ello se pidió la oreja que fue concedida por la autoridad.
El segundo utrero de la tarde para Álvaro García, un novillo castaño con carita y fuerte de remos. Saludó García con cuatro verónicas muy buenas más la media de remate. Con la muleta inició labor por alto, logró ligar por el pitón diestro en dos ocasiones, largos fueron los naturales manejando bien la muñeca y en torero, estuvo por encima de las condiciones del novillo; mandándolo al desolladero de una estocada entera en muy buen sitio. Oreja con petición de la segunda.
El tercero un novillo terciado y muy abanto fue para Emilio Silvera al que lanceó en la boca de riego bien a modo de saludo. Iniciando faena con pases por alto ganándole terreno, ya fuera de rayas, bien colocado ligó cuatro redondos y su labor fue a más por ese pitón, quiso hacer lo mismo por el pitón zurdo, pero los naturales fueron medios pases y bastante despegadito rematando con el doblete de pecho, hay que destacar que estuvo valentón al terminar labor, la rúbrica fue un estoconazo pero quizás un pelín desprendido pero de mucho efecto, trofeo para el novillero.
Un novillito que supo humillar fue el cuarto para Alfonso Cadaval, que lanceó el torero con mucha soltura. A los medios se fue hincando las rodillas en la arena enjaretando cinco derechazos más el de pecho, ya de pie y con la misma mano le perdió pasos, pese a ello los pases llegaron a los tendidos, a mejor fue por ese pitón, los naturales fueron más bien medios pases y todos para afuera, a mi entender estuvo por debajo de su oponente. Eso sí con el acero un feo metí-saca, para luego dejar una estocada entera algo traserilla doblando el animal. Oreja más que regaladita según mi forma de ver y entender.
Un novillo serio aunque quedado y algo flojo fue el quinto. A la puerta de los sustos se fue Carlos Ochoa a recibir a su oponente a porta gayola con mucha disposición, de pie y en plan de novillero los lances acompasados a la verónica. Tomó la muleta y en el centro del platillo citó de lejos y ejecutó cuatro buenos y largos redondos diestros de excelente dibujo por esos lo olés que le acompañaron, lo mismo hizo con la zocata manejando aún mejor la muñeca y la faena tomó vuelos, dos circulares invertidos de 360 grados que llegaron a los tendidos siendo ovacionado; epílogo por bernadinas ajustadas con sustito al final. No estuvo muy fino con el acero, pero supo llegar a los aficionados y por ello el trofeo pedido con vehemencia por los generosos aficionados, sacando el albo pañuelo el Presidente.
Un torito y con carita el que cerraba plaza y feria, que terminó quedado fue a las manos de Marcos saludando a su oponente con una larga cambiada de hinojos, sumando unos lances acompasados rematados con una revolera ya de pie. Mejor labor fue aun con la franela, primero doblándose toreramente con el bonito animal, ya fuera de rayas redondos diestros de buen tono y naturales largos rematados detrás de la cadera, tiene maneras y está puesto, destacare un circular lento, es un novillero que puede funcionar y bien, como final una serie de pases sin el ayudado y con cierta torería; remató labor con un espadazo en los rubios y la oreja cayó por su propio peso.
Así fue y así terminó la feria de Sanse 2017 y hasta el próximo año. Os Espero el domingo en Las Ventas del Espíritu Santo.
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