Entendemos que el encaste Núñez es más terciado que otras procedencias, pero hoy hemos estado más cerca del medio toro, que del toro hecho. Tan solo el cuarto dio la estampa de toro. La sensación desde hace unos años es que en Las Ventas se está bajando el trapío.

Fiscal abrió plaza y con él confirmó Álvaro Lorenzo. Fiscal, de pelo negro, bragao, astifino y armónico. Bonito en conjunto. Respondió a la lámina del medio toro. Descompuesto en los primeros compases de la lidia, se dejó picar sin capacidad de lucha. Arriba echó la cara en banderillas también lo había hecho en el capote. Descompuesto siguió la muleta, tiró derrotes y deslució. Tardeó por la falta de casta. Fue deslucido y le faltó entrega.

El segundo de la tarde respondía a Castañuela. Hondo, pobre de cara, ligeramente acapachada, ni la bastedad de cabos le daban seriedad. Suelto salió del capote de Juli. Tomó dos picotazos a su aire de caballo a caballo y una entrada más formal. Fácil y desentendido fue en banderillas. Noble en los inicios de muleta. Arriba echó la cara por el zurdo a la salida. Con más entrega por el derecho. Tuvo un comportamiento de bravucón, bruto en sus acometidas y con buen fondo.

Ginés Marín confirmó con Favorito, un castaño, bonito, bajo y bien hecho. Dudó y no llegó  a entregarse en el saludo. Se arrancó de largo y se empleó bien en el caballo, sin mostrar poder en ambas entradas. Facilón fue en banderillas. Suaves fueron sus primeras embestidas, de suaves pasaron a cortas y de cortas a anodinas. Tan noble como soso, algo más entregado por el lado izquierdo. Una babosa en el último tercio. Sin casta y ni un ápice de bravura.

Cornetillo fue el segundo de Juli, de pelo negro, serio, tocado de pitones, el único que mostró hechuras de toro hecho. Repetidor en el capote. Se pensó mucho el ir al caballo y protestó en ambas entradas. Esperó a los banderilleros midiéndoles. Humillado y templado siguió la muleta por el derecho, con menos entrega por el izquierdo hasta llegar a quedo. Moribundo después de la tercera tanda fue maltratado hasta dar la piel.

En quinto lugar se lidió a Peleón, negro listón, protestado por falta de trapío, anovillado, tapado por la cara. Silleto, de penca descubierta. Salió engallado y se frenó en el capote. Se empleó en el caballo, aunque el segundo puyazo fue muy medido. Esperó en el segundo tercio. Se empleó tras la tardanza y descolgado siguió la muleta de Álvaro Lorenzo. Le faltó repetición a izquierdas. Pero tuvo fondo hasta que le acortaron las distancias. Bueno por el pitón derecho y aceptable por el zurdo. Noble y encastado en la muleta.

Barberillo el mejor toro en la muleta

El toro de la tarde en la muleta fue el manso sexto de nombre Barberillo. Estrecho de sienes, alto y con poca seriedad. "Derribó" en varas… simularon el tercio. Aperreado estuvo en banderillas. Repetidor inicio, con claridad por el izquierdo, humillado y entregado en la muleta de Ginés Marín. A derechas también dio buen juego, embistió con alegría. Fue a más con buena casta, tuvo  buen fondo y buenas intenciones. Fue una gozada ver embestir a este manso encastado en el último tercio.

La corrida sin ser escandalosamente buena, no ha aburrido en exceso. Los lotes han resultado parejos, cada torero ha tenido un toro potable en mayor o menor grado… Pero es lamentable que siempre andemos rozando el mínimo.

Foto: Lasventas.com