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Cuarta corrida de feria en Canaveralejo. Gran expectación por la venida de Manzanares a estas tierras, después de tres intentos fallidos a causa de sus varias cirugías en las manos, según nos decían y así lo creemos.
Abriendo plaza, Guerrita Chico, torero de Cali y cerrando la terna, la revelación del momento, el peruano Roca Rey.
Los toros son del Doctor Ernesto Gutiérrez, ganadería muy solicitada, diríamos más bien que impuesta por las figuras, a tal punto, que Bogotá abrirá las puertas de La Santa María después de 4 años con los toros del Doctor Gutiérrez, habiendo ganaderías bogotanas con tradición y solera. El Juli lo quiere así y así será la reapertura de la más importante plaza de Colombia.
Pues esta ganadería de raticas con cuernitos abrochados, trajo a Cali esta tarde, sin ningún recato, un gazpacho. Seis engendros de diferente tipo, edad, cuernitos y tamaño. Pero en lo que si los igualó el Doctor Gutiérrez fue en mansedumbre.
Es verdaderamente increíble que un ganadero haga esto en una plaza de la importancia de la de Cali. El irrespeto total, la falta absoluta de vergüenza. Este ganadero ya lo dijo alguna vez por los micrófonos de una importante cadena (sic) Es que así me los compran.
Ya la gente en los tendidos, siendo una afición poco o nada conocedora del tema taurino, esta tarde se mosqueó. Toda la corrida fue pitada en el arrastre.
Guerrita Chico triunfó con los dos menos malos del encierro. Dignidad, oficio, entrega y buen gusto en algunos pasajes de su actuación. Entendió a sus oponentes, los consintió, los sujetó en los medios para que no se fueran antes a las tablas y consiguió salir en volandas de su plaza.
Manzanares con un par de becerrotes afeitados de manera inicua, intentó justificarse, consiguiendo la buena voluntad de este público fiestero y agradecido.
Roca Rey en la misma tónica. Lo intentó todo de su repertorio, en ocasiones se acordó que él sabe torear por lo fundamental y dejó chispitas en el ambiente.
Tarde para recordar. No tenemos idea de las consecuencias que va a tener este irrespeto de ganadero, empresa, apoderados, junta técnica y presidencia del festejo. Cañaveralejo fue una corraleja en este 28 de diciembre. Nada más ni nada menos que el 60 aniversario de la plaza.
Hay que llorar por la Cali taurina. Vamos a llorar que no queda de otra.
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