Con dos tercios de entrada se han lidiado tres novillos de El Tajo, dos (1º y 4º) de La Reina y un sobrero (5º bis) de Ave María, de poco juego en conjunto.

Manolo Vanegas, silencio y ovación

Pablo Aguado, ovación tras aviso en su lote

Rafael Serna, silencio en ambos.

Foto archivo

Otro largo y tedioso festejo fue la novillada inicial de la feria otoñal, eso sí con más público de lo habitual, notándose el obligado abono. La tarde con una temperatura agradable y luciendo Lorenzo en el despejado cielo madrileño.

Creo que a todos nos decepcionó el encierro de Joselito con sus dos hierros de El Tajo y La Reina, esperábamos mucho más de los pupilos de José Miguel Arroyo, dado que en otras plazas han cosechado triunfos importantes, no así el día de hoy en Las Ventas de Madrid.

Los chavales por decir algo, ya que están pasaditos en años, pusieron mucha voluntad y ganas sin duda alguna, pero con esos mimbres pocos cestos buenos se podían hacer y a las pruebas me remito: El venezolano Manolo Vanegas, silencio y saludos desde el tercio en su lote; el sevillano Pablo Aguado, saludó en sus dos utreros y el otro de Sevilla, Rafael Serna, silencio en ambos.

Los novillos anunciados para este primer festejo, silenciados camino del desolladero, así como también el sobrero de “Ave María” que hizo quinto al correrse turno, ya que el titular segundo fue devuelto a los corrales por inválido, este novillo también fue faltó de raza. Presencia nos les faltaron, armamento tampoco, pero si casta, apenas cumplieron ante las cabalgaduras, tercio que pasó desapercibido. El peso medio en la balanza fue de 468 kilos.

Pocas cosas destacables pudimos apreciar de las actuaciones de la terna, eso sí se esforzaron todo lo posible para salir del trance, pero cuando no hay material no hay posibilidad de lucimiento y para más inri, sus oponentes no prestaron ninguna posibilidad de lucimiento. Cositas las hubieron pero sin ir a mayores; bien se puede decir que fue un festejo más y que no pasará a la historia de Las Ventas.

Finalmente, lo más destacado fue que Aguado fue arrollado por el sobrero de Ave María al recibirlo de rodillas en el centro del ruedo, saliendo casi ileso de una compremetidísima situación.

De las cuadrillas destacó uno del castoreño José Ney Zambrano picando al cuarto que le correspondió a Manolo Vanegas. Se desmonteró el torero plata Ángel Gómez de la cuadrilla de Pablo Aguado, también fue aplaudido Rafael González de la misma cuadrilla; por último hay que mencionar A Christopher Fourcart a las órdenes de Rafael Serna.

Corta ha sido la crónica pero cuando no hay, no hay. Esperamos y deseamos que el día de mañana la corrida anunciada de para más.

Parte facultativo: Pablo Aguado sufre traumatismo facial con hematoma región malar izq., puntazo cara posterior de parrilla costal dcha. Pendiente estudio radiologico. Pronóstico Reservado.