Bien presentada y con muchos aspectos positivos la corrida de Ana Romero que abrió la presente edición de la feria de San Ignacio en Azpeitia. En tarde muy lluviosa -a punto estuvieron de suspender tras dar Luque muerte al segundo de la tarde- la terna se encontró con toros nobles y con movilidad que en general obedecían al toque y se desplazaban bien, con el sello de la casa y lo que eso supone. No estuvieron bien tratados en el caballo. El tercero, al que dejaron colocarse en el peto, metió la cara y los riñones de una forma muy bella. La corrida sirvió pero se pinchó en exceso. Pinchó Juan Bautista a su primero, y también a su segundo al que quiso matar, por dos veces, recibiendo. No obstante, fue muy interesante y variada la faena del francés al segundo de su lote, al que sin duda hubiera desorejado de no ser por esto. Mató de estocada Luque a su primero y a éste le cortó una oreja, la única de la tarde. Borja Jiménez también erró con el estoque en cada uno de los de su lote. Importante que el joven sevillano solucione esa carencia porque perdió trofeos en el que cerraba plaza después de haber arrebatado dos series de aplausos muy importantes del respetable.

Luque recibe el trofeo ante la lluvia. Foto: prensa Luque