|
La corrida de Victorino Martin de hoy, ha tenido interés. Hubo cosas que me gustaron y otras que no. Todos nos acordábamos del toro “Cobradiezmos” que se indultó en Sevilla y soñábamos con que saliera uno así, por el contrario también recordábamos la corrida del año pasado con la encerrona de Manuel Jesús “El Cid” y se nos venían otros pensamientos a la cabeza.
Antes que nada me gustaría decir que la corrida no vino exagerada de presencia. Es verdad que hubo toros serios por delante, pero por los cuartos traseros a algunos de ellos les faltaba remate y mas cuajo. Después de comportamiento me agrado el lote de Miguel Abellán que no lo terminó de aprovechar, junto con el tercero de la tarde que le correspondió a Manuel Jesús “El Cid”. El que salió como una auténtica alimaña, sumado a que le realizaron una muy mala lidia por parte de “Antoñares” y que podía tener problemas en la vista, fue el primero, resultó imposible plantearle faena. El madrileño Uceda tampoco estuvo nada fino en la tarde de hoy, ante su primero es verdad que el toro no servía pero debió de doblarse un poco mejor con él. Es verdad que ninguno de los toros, terminó de romper del todo, ni fue un derroche de casta ni de raza, pero hubo algunos con interés.
Un buen tercio de varas Entre las cosas positivas que vimos fue el gran tercio de varas de Juan Bernal en el tercero de la tarde. Como pusieron al toro de largo y le picaron en toda la yema. Aparte el picador en el primero de los encuentros estuvo muy bien yendo de frente a la res y tirándole el palo. La suerte de varas, es maravillosa cuando las cosas se hacen bien. El picador se retiró con una enorme ovación de todo el público, pudo ser junto con el de Israel de Pedro al toro Malagueño, el mejor tercio de varas de la feria.
Y Manuel Jesús “El Cid” que para nada quiero justificarle, ni decir que lo ha hecho maravillosamente. Pero hoy por lo menos le he visto con una mejor actitud que la otra tarde de la feria y la que venimos viendo estos últimos años. A su primero lo quiso lucir en el caballo, poniéndolo de largo. Y en la muleta dio algunos lances templados y de calidad, pero sin llegar a tener la redondez ni profundidad que en sus buenos años. Con los aceros, es con lo que no estuvo acertado.
No quería terminar este articulo sin mandar mi enhorabuena a Victorino Martín padre, por el homenaje que hoy se le ha rendido en su querida siempre plaza de toros de Las Ventas. Se le ha puesto una maravillosa placa en la Puerta Grande de Madrid, donde están los maestros de la tauromaquia. Esperemos que la ganadería esté en buenas manos, con su hijo y su nieta.
|
|