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No cabe duda que el diestro de Salteras Manuel Jesús El Cid es un torero de categoría, con clase y definido en sus ejecutorias toreras.
Sin embargo un colectivo de rancios aficionados abonados en plazas no solo de Colombia sino también de otras latitudes taurinas, coincidió en su situación de malestar y desconcierto por la presentación aliviada que mostró El Cid recientemente en la corrida de Puentepiedra.
Aliviado con el pico “Así como los toreros exigen una serie de condiciones para presentarse en una plaza, consideramos nosotros los aficionados que también estamos en nuestro derecho de exigir que el torero se brinde totalmente en el ruedo, aprovechando al máximo el toro con bondades y tratando con su técnica y conocimientos buscarle posibilidades al descastado”.
El toro empuja con el pitón derecho la punta del engaño “Los toreros llamados "figuras" deben ser consecuentes con los altos costos que estamos pagando los aficionados, no solo en boletería sino también en desplazamientos, hoteles, comida, etc., para ir a ver actuaciones desganadas y poco profesionales”, concluyeron los aficionados que salieron inconformes con la actuación de Manuel Jesús El Cid.
Con la panza de la muleta? Uno de los aficionados defraudados hizo llegar a nuestra redacción las fotos que animan esta nota, dejando ver trazos muleteriles francamente alejados de cualquier composición ajustada a los cánones y preceptos ortodoxos de la tauromaquia.
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