El Fandi en un pase de pecho

El primero de la tarde para El Fandi fue un toro que peleo en el caballo y tuvo cierta aspereza en la muleta que aunque templada fue despegada del cuerpo del torero. Estocada trasera y desprendida que se premió con la oreja. En el segundo un toro con mucho que torearle por su transmisión, quedó en la mitad mereciendo más suerte el ejemplar. Toreó en redondo de rodillas pero cuando quiso intentarlo por el pitón izquierdo el toro lo achuchó y hasta ahí llegó la labor que también fue premiada con una oreja después de estocada fulminante. En ambos cubrió el segundo tercio pero sin el show de la carrera hacia atrás perseguido por el toro.

Roca Rey de hinojos

Andrés Roca Rey maneja muy bien el capote con variedad en las suertes; gaoneras, cacerinas, tafalleras y garbosos remates. La labor con la muleta en sus ejemplares tuvo momentos de repentismo emulando por instantes  los muletazos que realiza Alejandro Talavante. El peruano gusta más del toreo encimista olvidando a veces que los toros necesitan espacios, sitio y terrenos, situación que no sucedió cuando los astados lo pedían. En el primero se pegó un arrimón monumental y en el segundo lo ahogó tanto que se quedó sin gas parándose y aprovechando la circunstancia para alardear con su valor. Ojalá replantee la posibilidad de las distancias para que los toros embistan más desahogados.

Posada de Maravillas con la diestra