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Anotábamos en el Apunte anterior que la duda era el encierro que habría pedido Julián López para el tan esperado mano a mano con “El Payo”; ya sabíamos que el binomio “Juli”-Fernando de la Mora es una verdadera amenaza para la Fiesta y, desgraciadamente, no nos equivocamos. Lo que mandó este deshonesto ganadero en indecente complicidad con el torero madrileño fue un verdadero fiasco. Nada les importó que la mayoría de la gente que fue a verlos haya sido víctima de una reventa feroz, pagando precios elevadísimos para ver un desfile de novillos sin la mínima presencia para una plaza con el aforo que tiene el coso capitalino. Sin embargo la gente iba dispuesta a divertirse -había que desquitar de alguna manera lo pagado- y coreaba lo que fuera con tal de divertirse; tanto así que festejó una “faena” a un novillo corniausente que salió en quinto lugar... Así es el público que llena la Plaza México.
“El Juli” vino a mofarse del público capitalino Lo del juez Morales -¡qué paradoja! si hay algo inmoral en este mundo son las desiciones que toma este señor-, es de risa. ¡Qué bueno que esta corrida no se transmitió a España! Seguirían carcajeándose de nosotros.
“El Payo” naufragó ante un lote infame; si el encierro completo era una vergüenza, lo que le tocó al queretano fue para desilusionar a cualquiera.
Poco pudo hacer “El Payo” ante un lote infame El próximo domingo nos espera otra calamidad ya que Bernaldo de Quiroz también se especializa en mandar novillos engordados a la México. A ver cómo nos va.
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