Se dio el inicio de la llamada Temporada Grande en el coso de Insurgentes con mejores resultados de los esperados: para empezar hubo un gran ambiente, manchado apenas por unos cuantos inadaptados que gritaban las tonterías de siempre, pero como siempre, nadie les hizo caso. Dentro de la plaza se dio una gran entrada; el juez no estuvo tan desacertado como era costumbre en el bimbo capitalino; no fue protestado ni un toro y no hubo toro de regalo. Me parece que esto es un buen augurio para el resto de la Temporada.

Eulalio López “Zotoluco” no las trajo todas consigo; en un momento dado hasta se vio un tanto apurado y parecía que el toro le ganaba la partida. Ni hablar, hay tardes así.

Jose María Manzanares lució su elegancia en el vestido y en el toreo, con algunos pases de calidad y con el sitio propio de los peninsulares, aunque la oreja que se le otorgó me parce que fue un tanto exagerada;  ya sabemos que a los extranjeros se les trata con demasiada benevolencia en suelo azteca. Así es el público mexicano.

La elegancia de Manzanares quedó plasmada con el capote

Joselito Adame salió hecho un tornado: con buen toreo y con toreo del llamado “alegre” -para que no se oiga muy feo el asunto-, el de Aguascalientes arrasó con todo a su paso y cortó tres apéndices que lo convirtieron en el triunfador del primer festejo de este serial que apenas inicia. Seguramente habrá muy buenas entradas en sus siguientes compromisos en la plaza México que será insuficiente para verlo nuevamente.

Joselito Adame vino a la México a triunfar... y triunfó

El cartel del próximo domingo está un tanto flojo y seguramente se reflejará en la entrada, pero como buen aficionado hay que ir a todas. ¡Suerte!.