Con lleno aparente, se han lidiado cuatro toros de Jandilla y dos (1º y 3º) de Vegahermosa, de juego desigual. Corrida Goyesca. Rodolfo Rodríguez “El Pana”, oreja y tres vueltas al ruedo
Morante de la Puebla, ovación y pitos Talavante, ovación y dos orejas. Talavante ha salido a hombros en la corrida goyesca de Antequera La tarde de la corrida goyesca en Antequera ha hecho felices a los aficionados y a los menos aficionados también. En el cartel tres toreros capaces de todo... o de nada. Hoy ha habido más de lo primero.
Los tres espadas llegaron a la plaza juntos y en calesa. Detrás sus cuadrillas Y hablando de lo primero, hemos de decir que de forma totalmente inusual todos los toreros han llegado a la plaza en coches... (ya se que eso es lo normal)... pero tirados por caballos. En el primero los tres espadas, algo casi del siglo pasado, pero que muy pasado. Han hecho las delicias de cuantos antequeranos quedaban en las calles (los espectadores con entrada les esperaban casi todos dentro). Si esa forma de llegar a la plaza se pudiera practicar con más frecuencia, es seguro que haríamos más aficionados entre los que presencian tan colorido desfile.
Pero hubo de salir el toro y eso no fue lo mejor de la tarde precisamente. A salvo del sexto, el mejor, y algo del primero, los demás muy apagados y desrazados. El Pana llevando largo al natural a su oponente Fue en esos, 1º y 6º, cuaando los trofeos llegaron a las manos de los toreros. El Pana entusiasmó al público, que prácticamete llenaba la plaza, con sus formas ortodoxas y también con la heterodoxas. Nada dejó en el esportón el Brujo de Apizaco, sorprendiendo, para bien, a quienes nunca le habían visto. Oreja en el primero aunque se pidieron las dos y tres vueltas al ruedo, la última a todo correr, en su segundo tras fallar con el acero. El Pana, cuyo nombre fue repetidamente coreado por el público, debe tener ya el contrato del próximo año en su bolsillo.
Talavante toreando en redondo El otro triunfo fue para un Alejandro Talavante pletórico. Pleno de variado repertorio y seguridad ante sus dos oponentes, pero siendo más compacto su trasteo en el último cuya condición era la adecuada para estar francamente bien.
Morante saludando la ovación en su primero Morante dejó momentos de su calidad y expresión en su primero que fue muy parado y no se dio coba con el segundo que completó el peor lote de la tarde.
Así se despidió El Pana de Antequera
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