En días pasados, en la centenaria Hacienda Santín, se llevó a cabo la tienta de dos hembras y un macho, procedentes de dos distintas ganaderías, mismas que pastan en los potreros que circundan el casco de esta legendaria propiedad.

Casa de abolengo en el Valle de Toluca

Previo al inicio de las labores con los trastos de torear, fue necesaria una ardua tarea en el ruedo para dejar en las mejores condiciones el lodoso terreno provocado por las lluvias incesantes de esta época del año.

Alejandro Contreras encargado de probar en el caballo la vaca de Don Paco Corder

Don Luis Martínez Vertiz, uno de los anfitriones de esta tarde, presenció la  prueba de la primera vaca, perteneciente al hato de Don Paco Cordero.  La hembra fue tentada en primer término por los nietos de Don Luis y posteriormente, por el novillero Héctor Gabriel.

Pie en tierra, con Héctor Gabriel para ver el desempeño de la vaca de La Acequia

Tras este primer turno, la familia Martínez Vertiz dejó la cita en manos de Alejandro Contreras Zacatecas, quien examinó una hembra y un macho de la ganadería La Acequia. El novillero poblano Héctor Gabriel, fue el encargado de probar con capote y muleta a la vaca, con la cual se dijo haber sentirse muy a gusto gracias a sus cualidades. Ya en calidad de esparcimiento, Gabriel Lejtick y Ricardo Garduño tuvieron oportunidad de darse las tres.

Y así la toreo el joven poblano

Breve jornada campera, pero intensa en afición e ilusión por la familia de Alejandro Contreras (esposa e hijas, especialmente) quienes hacen sus pininos en estas empresa de criar ganado bravo, vivimos entre por un pequeño grupo, integrado fundamentalmente por la familia Contreras y un puñado de amigos: los citados Lejtick -con su esposa- y Garduño, Jaime Infante representante de la ganadería Atenco, el periodista Luis Hernández, Héctor Gabriel acompañado por su padre. La tertulia posterior se alargó por varias horas, con un menor –si cabe- petit comité.

Una cita con familiares y amigos