Ficha del Festejo.

Otra tarde más del ferial y con esta van siete, que se salda sin pena ni gloria y eso que un Valiente torero logró cortar un apéndice en el primero de su lote y pagó con su sangre en el que cerró plaza, ese fue el malagueño Jiménez Fortes; completaban el cartel: el madrileño Uceda Leal que ésta vez ni apuntó ni disparó, retornaba a Madrid el mexicano Diego Silveti, mermado de facultades aun por su reciente percance en su tierra natal y que acusó la merma de facultades.

Los toros de Salvador Domecq Sainz de Rosas, pese a su encaste Domecq Díez, resultaron, ásperos, correosos y descastados en términos generales, apenas destacó el toro tercero que obtuvo palmas camino del desolladero, que tampoco era para tanto ya que simplemente cumplió con su deber de embestir con alguna claridad, el resto de la camada silencio, camino del desolladero; el remiendo de Fidel San Román escuchó pitos cuando las mulillas se lo llevaron; corrida cinqueña y que dio en bascula una media de 574 kilos.

Una oreja paseó el malagueño

El más destacado de la terna fue sin duda Jiménez Fortes, al lucirse toreramente en el tercer cinqueño, primero de los que sorteó, un toro agresivo de cuerna, algo noblón y sin fuerzas, al que Fortes lo recibió en la puerta de los sustos con un limpio lance, en pie unas excelentes verónicas que fueron fuertemente aplaudidas por el personal; apenas cumplió en el tercio de varas yendo a mejor en el último tercio, el malagueño supo aprovecharlo, iniciando la faena por estatuarios, se fue a los medios, citó y ejecutó una larga tanda con la mano diestra, sobresaliendo un solo redondo y el doble pase de pecho, por el otro pitón la cosa se puso fea debido al fuerte viento reinante que en más de una ocasión descubrió al torero y saliendo por lo tanto los naturales embarullados, él epílogo tuvo su miga, entusiasmando a los parroquianos con unas bernadinas de infarto, eso y el espadazo propinado al burel, decidió a los aficionados a sacar sus blancos pañuelos y que fue a atendido por la autoridad que concedió el trofeo. Un toro largo, grandullón y bastote fue el cinqueño sexto.

No todo fueron riesgos y cornada, también toreó así al natural

El de Málaga y por segunda vez se fue a la puerta de chiqueros y le endilgó un farol a lo que hay que sumar cuatro verónicas, una chicuelina y un remate, todo eso coreado con los olés del público; fue el único ejemplar que empujó en el caballo incluso llegó a romanear. Al centro del anillo se fue Jiménez para brindar a la concurrencia, se fue a los adentros iniciando quehacer doblándose toreramente ya en las afueras, tres redondos perdiendo el engaño al final, cambio de mano y al iniciar los naturales es feamente cogido, teniendo que pasar a la enfermería donde fue atendido de una cornada en el cuello; ese toro lo mató Uceda sin más trámite.

En el primero si fue Uceda... y Leal a su forma de matar

Retornemos al inicio del festejo, en que salió un remiendo de Fidel San Román, un toro morucho y de escasas fuerzas que fue pitado en el arrastre y que por antigüedad le tocaba a Uceda Leal a quien le molestó el fuerte viento que en esos momentos había en la plaza y que los pases ondeaban al igual que las banderas en sus mástiles, por ello ninguno de los pases tuvieron eco en las gradas, incluso se pitó la labor del torero de Usera, creo que sin razón, no era posible hacer nada debido al vendaval. Mató como siempre, de forma contundente. Pero en el cuarto, pintaron bastos, mal con la franela y peor aún con los aceros, en que dio un auténtico mitin, cosa rara en el torero de Usera, que es uno de los mejores estoqueadores de los últimos tiempos.

Silveti con la izquierda

Nos queda el de Irapuato (México), Diego Silveti, torero perteneciente a una larga dinastía de toreros mexicanos. Nada que destacar con el percal y trallazos con la franela en la mano diestra y apenas sobresalieron un par de naturales, luego la faena fue bajando en intensidad, pero hay que decir que estuvo digno. Con la toledana, una estocada entera en buen sitio algo tendida pero que hizo pupa, vendiendo cara su vida, hasta que por fin dobló el cinqueño.  No estuvo mal con el capote el manito saludando al quinto con verónicas acompasadas; buen tono y son tuvieron los redondos diestros, siendo aplaudido, valiente con la mano contraria, clavó el estoque simulado en la arena, dobló la muleta para citar al toro y endiñó una serie de bernadinas de esa forma, que si convencieron a los aficionados. Tomó la espada de verdad se enfrontiló entre los pitones para matarlo pero desafortunadamente pinchó reiteradamente para finalmente conseguir una estocada entera que hace mucho daño, doblando sin remedio el morlaco.

Silveti si se salvó de un buen susto

De las cuadrillas el único que destacó fue el banderillero Martín Blanco de las filas de Jiménez Fortes.

Mañana se espera otro lleno ya que en el cartel están: Miguel Abellán, Miguel Ángel Perera  e Iván Fandiño, ante reses de Parladé.   

Fotos: Muriel Feiner