Rafaelillo: “Cuando vas por el camino de la verdad, te respetan”

Con el torero murciano del momento y con un poco de jaleo flamenco para felicitar la Navidad terminó la programación de 2014 del Club Taurino. Rafael Rubio “Rafaelillo” volvió a entregarse a su gente en un Martes Taurino que colgó el cartel de “no hay billetes” y que tuvo su momento más especial cuando el maestro murciano donó un vestido de torear que tendrá un lugar de privilegio en el museo.

Rafaelillo en un momento del acto

Ambiente festivo por la proximidad de la Navidad y el reclamo de poder compartir un rato con el torero murciano más destacado del momento, Rafael Rubio “Rafaelillo”, hizo que muchos aficionados no quisieran perderse el último Martes Taurino de 2014.

El Club Taurino ha llevado a cabo durante la anualidad que ahora termina 125 convocatorias en las que ha exaltado la tauromaquia y subrayado su carácter único como “arte de artes”. Tras el paréntesis navideño se reanudarán las actividades para seguir promocionando y difundiendo la esencia de la Fiesta.

Rafael Rubio llegó al Martes Taurino acompañado de su familia y con una sorpresa para todos los aficionados. El maestro murciano donó un vestido de torear, en concreto el que lució una tarde de 2008 en Pamplona, que desde ahora formará parte de la extraordinaria colección del Museo Taurino de Murcia. “Rafaelillo” contaba así el porqué de ese traje al periodista José Francisco Bayona, que llevó el hilo de la charla: “Ese año pasé un bache profundo que me hizo replantearme mi profesión. Había perdido la ilusión y esa tarde en Pamplona recuperé las ganas de seguir toreando”, contó el del Barrio del Carmen.

Y los resultados posteriores demostraron que lo hizo con creces, como se comprobó en la revisión de las imágenes de la que  Bayona calificó como “mejor faena de la temporada”. Se refería a la realizada por el diestro murciano en Dax ante toros de José Escolar. El propio torero afirmó que él también sentía que en Francia había realizado “una de las faenas más importantes de su carrera”; una comparecencia, la de Dax, que junto a las tardes de Mont-de-Marsan y Valencia resumen los momentos cumbre del torero la pasada temporada.

“En Mont-de-Marsan, ante los Miura y con las cámaras de Digital+ de testigos, me puse a mí mismo un ultimátum. Tenía claro que debía pasar algo, fuera lo que fuera. Y afortunadamente ese día salió cara”, recordó Rubio, quien a modo de resumen de aquella tarde de julio se queda con un titular que leyó después: “Rafaelillo desafió a la muerte”.

El diestro quiso destacar la importancia de las tardes vividas en el país vecino en su carrera. “En Francia siempre me he sentido rescatado cuando atravesaba momentos difíciles”, dijo. Y tanto fue así que tras ese “mensaje de seguridad” lanzado en Mont-de-Marsan, las cosas vinieron más rodadas para el torero.

De hecho, apenas unos días después de su triunfo en Francia demostró en España, en la plaza de Valencia, “que nadie me iba a mandar a casa antes de tiempo”.

El 28 de julio se encontró con “Trastero”, un toro de Cuadri que desde que salió al albero “se hizo con el aficionado”. “Era un animal fiero, de expresión muy seria, al que apenas pude torear con el capote. Le puse al caballo dos veces en una suerte de varas muy bonita y desde el público oía que me decían que era un toro de triunfo”. El maestro brindó al respetable y cuajó “una faena importante por el escenario, por el momento y por un toro que me obligó a tirar de oficio y a estar muy entregado a él”. El resultado, Puerta Grande en una plaza de primera.
“Cuando lo tienes claro y vas por el camino de la verdad, te respetan”, añadió “Rafaelillo”, que desde el pasado 21 de diciembre tiene una calle a su nombre en la localidad murciana de Villanueva del Segura, donde triunfó como torero en 2007 y donde se ha reconocido con este acto su condición de torero importante de nuestra región.

“Conocí el pueblo en 2007, una belleza en pleno Valle de Ricote. Y allí me encontré con una afición generosa y cariñosa que me dio mucho”, comentó el diestro, para quien la inauguración de la calle “ha sido una de las cosas que más me ha llenado, fue algo inolvidable”.

En este punto el presidente del Club Taurino de Murcia, Alfonso Avilés, reivindicó que “Rafaelillo” tuviera su propia calle en el Barrio del Carmen, de donde es originario el diestro, en concreto de la Calle Caballero.

La noche terminó con las intervenciones de algunos de los aficionados allí reunidos y con el recuerdo de algunas anécdotas de la vida del torero, que narraron amigos presentes.

Y para terminar el Martes Taurino que cerró 2014, ya en plenas Fiestas Navideñas, llegaron los villancicos flamencos de Paquito Sánchez, acompañado con el toque de Faustino, que el público presente jaleó y aplaudió.