El
matador de toros Miguel Angel Perera asistió como invitado de honor del
Club Taurino de Londres (CTL) al almuerzo celebrado hoy (30 de
noviembre) en Londres. con motivo del 55º aniversario de dicho club.
Más de 130 aficionados, socios y amigos del club asistieron al evento.
El
maestro Perera había sido seleccionado por los socios del club como
matador de toros triunfador de la temporada 2014. Había viajado a
Londres en compañía de su apoderado, Fernando Cepeda, y sus respectivas
esposas, con el fin de conocer mejor las actividades del club.
El
Presidente del CTL, Sr. Mark Rayner, presidió el almuerzo. Felicitó al
diestro por sus múltiples triunfos durante la temporada taurina de
2014 y por su apoyo a la afición del Reino Unido mediante su presencia
en este almuerzo. Le hizo entrega del premio tradicional del club: una
jarra tradicional británica de plata.
Por
su parte Miguel Angel Perera dirigió unas palabras a los presentes,
agradeciendo la amabilidad del Club y a sus socios por su calurosa
recepción en Londres. Expresó su admiración por la afición de tantas
personas en una ciudad tan lejos del mundo de los toros, y confirmó su
deseo de volver a verles en España o Francia durante la próxima
temporada.
Entre
los invitados estaba el ganadero de toros de lidia, Don Justo
Hernández. El Presidente del CTL anunció que su reciente selección por
los socios del club, esta semana, como ganadero triunfador de la
temporada de 2014, y le hizo entrega del premio correspondiente: una
jarra tradicional británica de plata.
Entre
los invitados estaba el Embajador de España en Londres, Don Federico
Trillo, que también dirigió palabras a los presentes. Destacó la
importancia de la Fiesta Brava en la cultura mediterránea. Expresó su
admiración por el valor, técnica y éxitos del maestro Perera y su
satisfacción por el importante labor de los socios del Club Taurino de
Londres a favor de la Fiesta Brava, siendo esto un ejemplo admirable de
amistad entre los pueblos británico y español.
Perera en su visita al Club Taurino de Londres Los
conmensales brindaron por los futuros éxitos del invitado, por el
futuro de la Fiesta Brava y por la amistad entre los pueblos británico y
español.
El almuerzo tuvo lugar en pleno centro de Londres, en el “Oriental Club”
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