|
Hoy a San Isidro, más que el clavel, llega el súper clavel. Los famosos, vips, guapos y guapas (además de los aficionados, claro), llegarán en tromba a Las Ventas para dejarse ver en uno de los carteles (si no el que más) más rematado y redondo del abono. Tan sólo el desapacible viento puede espantar a alguna señorita temerosa de gastarse para nada todo un pellizco en la peluquería. Pero seguro que ni el viento, ni la lluvia, ni el frío enfrían las expectativas depositadas, sobre todo, en un nombre: Morante de la Puebla. El genio (para lo bueno y lo malo) sevillano vuelve a Madrid para trenzar el que será seguramente su único paseíllo este año en Las Ventas. Y, como además de figura, Morante ya se ha convertido en torero idolatrado y subido a los altares, la peregrinación para verle está asegurada. Por segunda vez en esta feria se pondrá el cartel de "No hay billetes" y todo por el tirón morantista. Ya veremos después si José Antonio está por la labor de cumplir tan desatadas pasiones en torno a su figura. Ya es algo el que haya elegido una divisa distinta a lo que mata habitualmente. Se apuntó a Montalvo, hierro del encaste Domecq, pero que aún posee un cierto fondo de casta y que, además de una larga y exitosa Historia, ha lidiado notables ejemplares no hace mucho en esta plaza. Parece que se encuentra en buen momento, pero ya se sabe: cuando las figuras se meten en una ganadería...
Pero los atractivos del cartel no terminan (afortunadamente) ahí. Los otros dos matadores anunciados también pueden sorprender. Para empezar Alejandro Talavante, una de las denominadas figuras del toreo actual que mejor ha encajado siempre en Madrid y que llega con renovados aires "espirituales" y técnicos. También (y eso no es tan alentador) con nuevo apoderado: Curro Vázquez. Tras un par de años de bandazos habiendo perdido su seña de identidad y habiéndose convertido en una más de las figuritas ventajistas, Talavante parece (o dicen) que ha vuelto por la senda de la pureza. Vamos, que ha vuelto a sus orígenes. Posee unas condiciones privilegiadas, con una mano izquierda prodigiosa, así que ojalá que sea verdad y hoy Alejandro vuelva a ser el Talavante que nos conmovió a todos los aficionados de novillero y, también, algunas temporadas, como matador.
Y abriendo plaza actúa el ya veterano Finito de Córdoba, que en otras circunstancias habría sido sinónimo de alivio y de telonero, pero que parece que ha vuelto por sus fueros. Lo ha hecho en Valencia o en Castellón (o el pasado año en la Feria del Pilar de Zaragoza), aunque eso sí, hasta ahora con el torito a modo (en trapío y comportamiento) que tan bien se adapta a su toreo. Pero bueno, algo es algo, y hoy Finito podría terminar como el gran triunfador precisamente en la tarde de Morante. Al fin y al cabo, ambos basan (o lo intentan) su tauromaquia en el gusto, la cadencia y el arte. En unas horas lo sabremos...
 Talavante es el elegido en el pronóstico para triunfar, incluso salir a hombros Toros de Montalvo, correctos de presentación y de interesante y buen juego en general por su nobleza y movilidad, aunque algunos justos de fuerza y casta.
Finito de Córdoba: silencio y oreja Morante de la Puebla: silencio y pitos Alejandro Talavante: saludos y dos orejas. |
|