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La Ficha del Festejo.
Vaya tardecita y entrada ya la noche; nueve toros salieron por la puerta de chiqueros, seis del hierro titular de La Palmosilla mas tres sobreros, que sustituyeron a los del hierro anunciado, por su manifiesta invalidez fueron devueltos a los corrales y con toda justicia; toda la corrida fue infumable. Parafraseando al Gallo; “lo que no puede ser, no puede ser y además es imposible” y cuánta razón tenía. Hoy aunque bajara el Sursuncorda el milagro era imposible, dada la mansedumbre de todo el ganado, ninguno de los nueves se salvan, ni merecen el más mínimo comentario, los nueve mejor para el matadero que morir indignamente en una plaza de toros y no digamos, en la más importante del mundo. Más dignidad y cuidado señores ganaderos.
 Pudieron haberse sumado más horas y lo de La Palmosilla seguiría igual El cartel tenía su atractivo; volvía a Madrid Juan José Padilla, cariñosamente bautizado “El Pirata”, para confirmar la alternativa a Manuel Escribano, cerraba la terna un torero que el año pasado estuvo a punto de abrir la puerta grande, me refiero al mexicano Joselito Adame, siendo el único de la terna de hoy que destacó y pudo dar la vuelta al ruedo, tras una petición de trofeo en el tercero de la tarde que con mucha razón no fue atendida por el Presidente D. Justo Polo Ramos, sin embargo se llevó una sonora bronca por parte del público que sacó sus pañuelos blancos en petición de una oreja.
 Solo Adame pudo encandilar a la asistencia con el de Torrealta Juan José Padilla estuvo y no estuvo, ni chicha ni limonada en el primero de su lote, segundo del festejo. Nada destacable en ese toro, incluso pinchó con la tizona y consiguió ser aplaudido en el tercio de banderillas. Muy desanimado en el segundo de su lote, el sobrero de Sánchez Dalp; eso sí tuvo detalle de brindar a la Infanta Elena que ocupaba una barrera del tendido dos, lo mejor de su labor fue el comienzo de faena en la boca de riego con las dos rodillas en tierra con la mano derecha, lo demás no cuenta, ya que estuvo más bien difuminado. Con los aceros mal, un vergonzoso meti y saca, una estocada entera tendida y tres golpes de verduguillo.
 Padilla tuvo que ponerse así, pero el desaste en el tendido era demasiado Hoy teníamos confirmación del sevillano Manuel Escribano, que al pobrecito y no lo digo en forma peyorativa, tuvo más bien de espaldas la suerte no solo en el manso toro de su confirmación que fue un toro desrazado, falto de casta y con las fuerzas muy pero muy escasitas, el de Gerena muy decidido se fue a la puerta de los sustos para saludar a portagayola a “Diligente” , un toro negro de capa con 531 kilos y nacido en enero del 2010 (esto para las estadísticas), lance casi limpio. Intervino cubriendo el segundo tercio de forma aceptable. Tras la ceremonia de confirmación, inicio la faena con ayudados por alto con las zapatillas atornilladas en la arena, pero el resto de su labor fue cada vez a menos, por culpa de las pocas o casi nulas condiciones del cuatreño. Eso sí supo meterle la mano con habilidad al entrar a matar, dejando una estocada entera desprendida pero muy efectiva.
 Escribano no tendrá esos recuerdos que sueñan sobre la confirmación Su segundo fue de La Rosaleda, un bóvido que de entrada se lo pensaba mucho antes de embestir al que le endilgó un buen ramillete de verónicas y dos medias como remate. Invitó a su Padrino a compartir el tercio de banderillas en que ambos consiguieron que el que paga aplauda. Pero ya con el trapo rojo no nos dijo nada, pasando sin pena ni gloria, hubo ligeras protestas por parte del público. Voluntad no le faltó, pero haga lo que haga y como iba la corrida cuesta abajo, nadie le puso atención ni se le tuvo en cuenta; eso sí logró meterle mano con la espada del que el morlaco salió muerto.
 A recibir de hinojos, las banderillas y algo más Otro sobrero y esta vez de Torrealta fue el tercero de la tarde que le correspondió a Joselito Adame que medio metió la cara y al que lanceó con donosura por verónicas. Doblones de torero caro y poderosos fueron los primeros compases al iniciar faena y de tiró se los sacó a los medios, para torear con la diestra en buen tono, cambio de mano y pese a que el toro no humillaba el mexicano logró sacarle algún partido, regresó al pitón más potable yendo a mejor su quehacer, sobresaliendo un bonito martinete; pero el morlaco perdió fuelle y se vino abajo rajándose y el hidrocálido sacó su valor a relucir siendo ovacionado que se la ganó con soltura. Bien con el acero dejándolo en un buen sitio revenando al de Torrealta. Hubo petición de trofeo, que no fue atendida por el Usía, llevándose una bronca injusta, eso sí dio la vuelta al ruedo sin protestas. Mucha leña tenía el sexto, muy abanto, soso y sin fuerzas, sin embargo el manito logró unas verónicas bajando los brazos y con mucho compas. También tuvo la cortesía de brindar su faena y la muerte a la Infanta; se fue al platillo iniciando por estatuarios pasándose los pitos por el fajín, eso arrancó los aplausos del respetable, como también los repitió al torear en redondo por el pitón derecho. Ganas desde luego nunca le faltaron pero el de México no tenía oponente alguno, cuando no hay, no hay. Encima no tuvo suerte poniéndose pesado con las espadas, más aun con el de cruceta en que yo perdí la cuenta de cuantos intentos precedieron hasta conseguir entregarlo al tiro de mulillas. Menos mal que aún le queda otra tarde el 30 de mayo.
 A la mitad, lo hecho por el mexicano pudo llegar a interesar Con la vara destacó Oscar Bernal y los rehileteros “Jarocho” y Tomás López, los tres de la cuadrilla de Joselito Adame.
Tarde, tarde se nos ha hecho escribiendo la crónica del día, por culpa de la larga corrida del día de hoy.
Mañana por hoy, de seguro que caerá más de una oreja y si no al tiempo.
*Fotos: Muriel Feiner. |
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