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Plaza Jorge El Ranchero Aguilar, primera de feria con lleno. Toros: dos de Xajay(1º. y 3º.), tres de San Isidro (2º., 4º. y 5º) y uno de Jorge María (6º.) unos justos de presentación y otros anovilladados. Eulalio López “El Zotoluco”: Aplausos, una oreja Enrique Ponce: silencio, dos orejas Octavio García “El Payo”: silencio, aplausos  Un respiro Ante un lleno en la plaza de toros Jorge “El Ranchero” Aguilar, se lidiaron toros de diferentes ganaderías, ya que fue rechazada parte de la corrida de San Isidro, toros justos en presentación algunos y otros anovillados, 2 de Xajay, tres de San Isidro y uno de Jorge María.
Y cuando se pensaba que la fiesta brava en Tlaxcala se respetaría en sus diferentes ángulos y actores de la misma, la ausencia de dignidad y calidad moral hacia la afición local se da en todo su esplendor, de inicio se devuelven toros por falta de trapío, edad y peso de la ganadería anunciada y en su lugar, se hace un coctel de diferentes ganaderías, las cuales mandan “toros” a la tierra donde más ganaderías de toros bravos existen en el país, como un mensaje donde confirman que primero está la “comodidad” para las figuras españolas que el otorgar su lugar a la gente que paga una boleto para ver un espectáculo taurino, durante el día del festejo a pesar de haber cambiado los “toros” nunca fue anunciado tal cambio, ni en la taquilla ni al momento de anunciar su salida al ruedo, violando con ello el Reglamento Taurino del Estado de Tlaxcala, ¿Conformismo? ¿Nobleza de la afición? No lo sabemos, lo cierto que nadie protesto lo que salió por la puerta de toriles, y dicen que el que calla otorga. En lo artístico es tema aparte, nadie le quita la clase y calidad en el toreo del valenciano Ponce o la maestría que dan los años en el toreo del Zotoluco, pero por que jugar con el razonamiento del buen aficionado, por que venir a día de campo de los españoles a México, ¿acaso no ya había terminado la conquista?. Pero recordemos que en Tlaxcala, la que se considera cuna del mestizaje en nuestro país cuando Tlaxcaltecas y españoles se unieron para lograr un paso más hacia la transformación en la historia de nuestra raza, por qué entonces no se da esa alianza en la fiesta brava, porque no se brinda un espectáculo con la seriedad que merece nuestro intelecto y nuestro amor hacia la fiesta, esperemos que las reflexiones nos ayuden a vivir en la posteridad mejores momentos en todos los aspectos de la vida taurina de Tlaxcala.  Buena entrada en la 1ª. de feria Eulalio López “El Zotoluco”.
Torero en plan de maestro, ha hecho dos faenas de diferente tesitura pero al final de mucho poder y conocimiento de la lidia, “Buen Amigo” con 458 kgs. marcado con el número 550, serie de verónicas cargando la suerte, al caballo puyazo bien colocado por parte de Moisés López Zotoluco, quite por chicuelinas aplaudidas, inicio de la faena rodillas en tierra del tercio hacia los medios, series por el lado derecho con poder, sufre una caída ante la cara del toro de manera peligrosa y afortunadamente salió ileso de la misma, insiste por ambos lados, por el izquierdo series con sabiduría, logrando una faena de mérito, continua por el lado derecho consintiendo mucho la embestida, termina su toreo por alto, con la espada dos pinchazos y una entera, para retirarse entre aplausos de reconocimiento de la afición, Con “Cori”, 457 kgs. lo recibe con mandiles suaves, verónicas y remate torero, coloca al caballo con un quite por chicuelinas andantes, puyazo justo y en excelente colocación del gran varilarguero Nacho Meléndez, con las banderillas pares de gran vistosidad y facilidad de Christian Sánchez, teniendo salida al tercio por la gente, Zotoluco comienza la faena por alto, con estatuarios, trincherazo y el desdén para terminar la serie, por el lado derecho el maestro de Azcapotzalco mete al son que desea al toro, por el lado izquierdo toreo reposado, faena de estructura, sapiencia y entrega, estocada trasera, desprendida y tendida de efectos rápidos, se otorga una oreja por el juez y el torero se le encrespa, bronca al juez con el público.  Poder con suavidad Enrique Ponce.
Torero valenciano, que ha llegado a tierras mexicanas a practicar el toreo que a la afición le gusta, nadie puede negar que el maestro español nos regala unas auténticas pinturas en cada muletazo o verónica que traza ante las embestidas de los toros, toreo estético y artístico sin ajustarse, pero de gran clase, con su primero “Compadre” de 463 kgs. con el capote inicia verónicas rodilla en tierra, para que posteriormente verónicas a un toro deslucido, recorte de pintura, con la muleta doblones toreros para que realice series por el lado derecho con maestría a un soso y descastado socio en la lidia, al final de la faena el toro termina con las embestidas descompuestas, y termina toreando relajado pero separado, trincherillas en la preparación para la muerte, la cual llega con una estocada con pésima colocación, retirándose en silencio  Estética, clase, sí, a distancia, hacia fuera, también La faena de la tarde curiosamente la tiene con un toro descastado, distraído y soso, cuánta razón tenía el inolvidable torero de la tierra Jorge “El Ranchero” Aguilar, cuando decía que sin bravura no hay trasmisión, y si hubiera existido ese parte medular en el toro, tengan la plena seguridad amigos aficionados que tendríamos la mejor faena vista al torero ibérico, con “Catrín” número 159 y con 459 kgs. Ponce regala una serie de mandiles a pies juntos suaves y templados, saliendo del tercio hacia los medios, después de la salida del caballo, realiza un quite por chicuelinas con las manos muy bajas rematando con una larga cordobesa, con la muleta, doblones toreros largos y templados, series por ambos lados, artísticos y estéticos, escenas que se quedaron plasmadas en la mente del aficionado como una exposición de oleos del mismo pintor mexicano Pancho Flores, pasajes como la “poncina” el “circurret” rodilla en tierra, desdenes y trincherazos, ante la entrega y algarabía de la gente presente, estocada hasta la empuñadura para que el juez le otorgara dos orejas y convertirse en el triunfador de esta tarde.
 No estaba muy sobrado de trapío el de las dos orejas Octavio García “El Payo”.
Torero queretano que en un inicio, demuestra una actitud fría y desangelada ante la afición, con su primer toro “Antaro” con 461 kgs. Con el capote paso de noche, con la muleta un toro “picoso” y tratando de torear lo más separado posible de él, torero sin intención, un solo momento de entrega hubo en esta faena y fue cuando le dejo la muleta en la cara y le corrió la mano, estocada trasera y desprendida para retirarse en silencio.  Falló con la espada El Payo Con “Ahijado” de 475 kgs. Un auténtico novillo que irónicamente solo unos cuantos recriminaron, verónicas sin ajustarse, con la muleta sin entregarse, series aisladas sin determinación, hasta que se presentó una voltereta fue como se encastó el torero y de manera atropellada toreó a un novillo que permitía el lucimiento por el lado derecho, codicioso en la embestida, pero el torero sin clase y buscando el tremendismo en su actuación, estocada y descabellos para concluir la primera corrida de feria. Fotografías de Luis Humbeto García |
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