Con un cuarto de entrada, se han lidiado novillos de Juan Manuel Escolar, bien presentados y que dieron buen juego, destacando el sobrero corrido en 4º lugar y el último de la mañana.
Joselito Adame, de la Escuela de Madrid, una oreja.
Juan Luis Rodríguez, de la Escuela de Albacete, ovación tras aviso.
Alberto Durán, de la Escuela de Salamanca, vuelta al ruedo.
Manuel Larios de la Escuela de Badajoz, oreja.
José Manuel Mas, de la Escuela de Madrid, vuelta al ruedo.
Y Miguel Ángel Delgado, de la Escuela de Jerez, saludos tras aviso.

Se proclamó triunfador del certamen “La Oportunidad”, en su modalidad de becerristas, el alumno de la Escuela de Tauromaquia de Madrid, Joselito Adame, con 135,1 puntos.

Repetían hoy en la final, los 6 becerristas que actuaron en la semifinal de la pasada semana, en reconocimiento a su buena actuación general que tuvieron ese día. Pero en esta ocasión no han podido repetir la buena mañana de toros que nos dieron en aquella ocasión. Bien es cierto que los novillos de Juan Manuel Escolar, han tenido ciertas complicaciones, que en novilleros tan poco toreados es lógico que no se solucionen con facilidad, a lo que hay que añadir los lógicos nervios de un día tan especial para todos ellos.

De esta manera, Joselito Adame, becerrista muy toreado, sobre todo en su tierra, se hizo con el primer puesto en este concurso, después de una actuación, si bien no tan redonda como la de semifinales, si que tuvo en algunos momentos un sitio privilegiado para sacarle al becerro tandas y muletazos, que en principio parecía que no tenía. Intervino en todo momento en quites y además realizó un buen tercio de banderillas, sirviéndole todo esto para alzarse con el premio. La verdad que durante todo el certamen Adame, ha dado muestras de estar muy toreado y sobre todo de ser muy listo tanto en la cara de los novillos, como en todo lo relativo a la lidia y al público.

Juan Luis Rodríguez, no tuvo suerte en el sorteo y le correspondió un novillo complicado, al que a base de meterse con él, logró sacarle alguna tanda meritoria.

Alberto Duran, salmantino, volvió a demostrar que tiene el toreo bien asimilado en su cabeza, pero en esta ocasión no lo pudo desarrollar, bien por el pobre juego de su ejemplar o como decía al principio por la responsabilidad que supone una actuación como esta. Lastima que nos quedáramos sin ver a este novillero, que apunta maneras.

Manuel Larios, pegó los mejores muletazos de la mañana, largos y templados en varias series con la derecha que llegaron al tendido. Apunta buena clase Larios y además demostró que le funciona la cabeza.

José Manuel Más, nos puso sobre aviso en el quite realizado al novillo de Larios, en el que realizó un quite que se convirtió en lo mejor de la mañana, rematado con una extraordinaria media, pero luego en su novillo, no llegó al nivel que esperamos de él, por lo visto en actuaciones anteriores. No llegó a acloparse con su oponente en ningún momento, solamente muletazos sueltos.

Para cerrar este certamen de becerristas, que mejor que fuera Miguel Ángel Delgado, novillero menudo y con cara de muy niño, pero que tiene un concepto del toreo y un ángel cuando está en la plaza, que encandiló a todos los que tuvimos la suerte de verle hoy. La verdad es que tiene muchas virtudes este jerezano, pero es digno de destacar, como se desenvuelve en la cara de los novillos y sobre todo que no hace ninguna concesión a la galería, torea por y para él, y a lo mejor ahora de becerrista puede ser perjudicial, pero con ese concepto del toreo que tiene, luego más adelante se puede convertir en alguien importante en el toro. Fue una verdadera lastima, que no matara al novillo, ya que su poco peso y estatura, convierte en su talón de Aquiles la suerte suprema, si lo hubiera matado, habría que haber visto como sería el final de este certamen.