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Hay veces que la suerte y los factores se alinean y todo sale bien, todo va sobre ruedas como se suele decir. En cambio, en otras ocasiones, pasa lo contrario, que todo sale mal y que parece que el destino no quiere que las cosas salgan adelante. La undécima de San Isidro fue un claro ejemplo de que cuando todo está en contra es muy difícil, por no decir imposible, que las cosas salgan bien. A la hora de hacer el paseíllo, con retraso, pocos se las prometían felices Ya empezó mal la corrida mucho antes de que llegara la hora de que sonaran clarines y timbales. Ya hace unos días se anunciaba que la corrida de Peñajara había sido rechazada y que habría que buscar una sustituta. Varias eran las opciones pero incluso alguna de esas alternativas tampoco era viable. El ejemplo la corrida del Tajo y la Reina, el hierro del maestro Joselito, que aunque fue enviada a Madrid tampoco pasó el reconocimiento veterinario. Finalmente, conocíamos que sería la vacada sevillana de Guardiola Fantoni la que lidiaría en la Monumental de Las Ventas. Legendaria y emblemática divisa pero que desgraciadamente lleva muchos años atravesando un mal momento y sin embestir. Incógnitas de cómo saldría, aunque tras ver al lote enviado desde El Toruño la cosa comenzó a ser preocupante. Encierro cinqueño y muy pesado con varios toros superando con creces los seiscientos kilos. Después, ya en la plaza, las sospechas se confirmaron y por los chiqueros del coso madrileño aparecieron astados demasiado grandones, altos, sin cuello y con muy poca pinta de embestir.
Y lo que tuvieron dentro no fue mejor que la fachada. Corrida dura, descastada, de mal estilo y nula clase…en definitiva, mala. Y al desastre de Guardiola se sumó la lluvia, el diluvio universal que cayó antes y durante el festejo durante la plaza de la Calle Alcalá. A pesar de que el público aguantó estoico, la lluvia y el frío deslucieron aún más la corrida dominical y dejaron una sensación muy desapacible difícil de soportar. El verano se fue, el invierno regresó, pero desgraciadamente lo que no cambió fue la desastrosa feria que estamos viviendo este año. |
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