Con poco menos de media entrada se llevo a acabo la corrida en la Monumental Playas de Tijuana, lidiándose toros de El Junco.

Eulalio López Zotoluco: dos orejas y dos orejas y rabo
José María Luévano: Palmas y palmas
Fernando Ochoa: Oreja y vuelta al ruedo

La figura se forja a la luz de los aficionados, Eulalio López “Zotoluco” un artista cabal que esta tarde comprometió su obra con su vida, se arrimo como los grandes, cruzándose con el toro manifestando exceso de concentración de confianza, y de poderío. Su primer faena dejo acariciar su casaca y su taleguilla por los pitones del burel; era ver una intimidad especial entre toro y torero. Los oles!! Se dejaban escuchar en un mismo tono y con un mismo tiempo, era el complemento perfecto traspasado por la belleza de su toreo.

A su primero de la tarde le corto las dos orejas y a “Georgino” su segundo lo indulto volcando una pasión colectiva por el triunfo del torero.

José María Luévano, mostró mucha voluntad y arrojo en su primero de la tarde  y solamente recibió ovación del respetable. A su segundo le falto un puyazo ya que con la muleta le estuvo ganando el terreno al diestro hidrocálido. Recibió ovación.

Fernando Ochoa, mostró su arte, su clase y sus buenas maneras, el michoacano con el percal  lo toreo con finas verónicas y lo remato con una preciosa larga cordobesa. Con la muleta mostró un toreo largo y profundo suficiente para una merecida oreja. En su segundo le bordo una buena faena pero fallo con el acero. Saludó en el tercio.

Zotoluco fue sacado en hombros.