Con casi tres cuartos de entrada, se han lidiado cinco toros de Juan Pedro Domecq y un sobrero de Parladé, jugado en tercer lugar. Chicos y de desigual juego. Enrique Ponce, silencio y ovación Pepín Liria, ovación y dos orejas Morante de la Puebla, silencio y oreja tras aviso. Pepín Liria repite cada año entrega en su plaza de La Condomina. Es la respuesta a ser colocado en los buenos carteles y anunciarse con el ganado de las figuras. Y se encuentra como pez en el agua, disfruta y hace disfrutar a sus paisanos. Hoy ha sufirdo una voltereta espeluznante, pero él sabe que hay que darlo todo en estos convites en los que le permiten sentarse a la mesa. Morante ha hecho, naturalmente, lo mejor de la tarde. Han sido varios los muletazos, sobre todo por el lado derecho, en los que ha hecho soñar con su toreo. Ponce ha estado a su nivel pero sin llegar a cuajar ante el lote menos afortunado. |