Lamentablemente todos los dichos se cumplen en la fiesta de los toros, hoy se cumplió aquel que dice que: Cuando hay toros... Ya saben. Hoy el encierro de Javier Pérez Tabernero sin ser excepcional ha brindado suficiente juego para disfrutar y hacer disfrutar: Cantinillo, Curioso y Yegüesero han sido tres buenos toros en la muleta con los matices que apuntamos a continuación... los tres restantes no fueron tan agradecidos. Cantinillo fue el primero de la tarde y su lidiador Antonio Ferrera; era zancudo y escurrido, veleto y degollao; avacado de hechuras y comportamiento –todos hemos oído en los tentaderos que aquella vaca embistió como un toro, el caso contrario también existe-. De salida fue sosote y algo flojo. Fue a más en varas y empujó bien en la segunda entrada. Siempre acudió algo suelto en banderillas aunque su comportamiento fue sincero. En la muleta fue bueno para el torero: noble por el derecho y profundo por el lado izquierdo haciendo el avión en bastantes embestidas, además de tener buen fondo. En el debe anotamos su falta de emoción al no empujar con los riñones y la falta de humillación en algunas fases de la faena. Sergio Aguilar lidió a Curioso, más armónico que el anterior, pero a la vez, más justo de trapío. No pasó en la capa del torero madrileño, le faltó codicia. Se empleó bien en la primera entrada al caballo y -¡ay!- le recetan un picotazo de segundo... Esto es Madrid señores. Es fijo, pronto y claro en el segundo tercio y así fue en la faena de muleta. Por el derecho repitió con humillación y va a más por el pitón contrario. En conjunto fue bueno por ambos, con suficiente fondo de casta aunque en algún momento apuntase rajarse al final del trasteo. Fue aplaudido al arrastre. Yegüesero completaba el terceto, era negro bragao corrido y de buena presencia. Receló de salida y no terminaba el viaje; pareció asustadizo. Empujó por delante manseando y derribó al caballo, en la segunda vara se mostró más bravo. Había sido sencillo de parear y fue fetén en la muleta. Por el lado izquierdo claro y boyante en al menos tres tandas y por el diestro, que empezó rebrincado, terminó entregándose en una buena tanda. Yegüesero fue un bicho noble y bravo, aunque manseó de salida, fue a más y terminó aplaudido al arrastre. Los tres restantes fueron otra cosa...El carbonero 'Cigarrero', 4º de la tarde Cigarrero mostró un bello pelo cárdeno carbonero, además de buena presencia. Eso sí, el cuajo justo o por debajo. Éste fue pegajoso de salida sin terminar de entregarse. Hizo mala pelea en varas y fue chochón en banderillas. Su comportamiento fue a menos en la muleta: de noblote a soso y de deslucido a quedado. Aunque noble, le faltó casta. No dio opciones a Ferrera. Pitito fue el quinto, nos pareció chico, la báscula había refrendado 605 kilos ¿Sí?... Pues vale. De cuerna poco desarrollada para este encaste y poco trapío. Se desplaza bien en el capote de Sergio Aguilar. En varas tuvo un comportamiento manso además de perder la vaina del pitón derecho que le afeó. También manseó en banderillas, se dolió. Dos tandas buena brindó por el diestro pitón; se vino abajo, receló la pelea y le costó humillar por el zurdo. Fue manso y descastado este quinto y único cinqueño de la tarde. Pitinesco iba a cerrar la corrida, pero por arte de magia fue devuelto en el tercio de banderillas –¿De magia?, vale de magia-. Fue Langostito de Valdefresno el encargado de cerrar el festejo. Serio y bien armado, abanto –manso- de salida que buscó toriles. Flojeó y mostró poco poder en varas y le hicieron la suerte de los pueblos: una y media puyas siendo generosos. A partir de aquí, fue un noble colaborador; franco repite en la muleta de Pinar por los dos pitones pero se derrumba varias veces y termina mortecino. El toro de regalo no sirvió. Así hemos acabado... Por motivos ajenos a este Portal y al firmante de esta sección, mañana y pasado no podremos cubrir la información de este espacio que titulamos: “El Toro es el Protagonista”. Por lo que pedimos disculpas a nuestros lectores. Ha sido un placer contar con todos ustedes. |