Ante unas mil quinientas personas, en tarde soleada y calurosa, se lidiaron novillos de Los Ébanos, sin presencia, descastados y manejables en general, destacando el 3º que mereció arrastre lento. Paúl Cortés: Silencio, silencio tras aviso y silencio. Rodrigo Muñoz Gitanillo de Tlalpan: Herido en su primero. Pepe López: Saludos tras aviso, saludos y palmas. Pepe López tuvo una buena presentación en el coso de insurgentes. Se llevó el mejor novillo del festejo al que aprovechó sobretodo al natural. Las ganas de lucir le hicieron verse rápido en sus procedimientos lo que le hacía perder el temple y el ritmo que pedía la res. Mal con la espada para saludar en el tercio. Sus otras dos faenas, tanto en el que mató por el herido Rodrigo Muñoz en donde hubo algún muletazo aislado de calidad, como la de su segundo, donde abrevió correctamente, no trascendieron. Paúl Cortés anduvo totalmente perdido. No fue lo mismo el “bobillo” de Rancho Seco que los pequeñines de Los Ébanos. A pesar de su voluntad, demostró que no posee el poder para lidiar los manejables novillos. Toreó despegado sin transmitir nada al tendido. Sus dos faenas fueron pegando pases por todos lados. Al que hirió a Muñoz tampoco hizo nada, se limitó a despacharlo. De Rodrigo Muñoz no se puede hablar mucho, sólo de la grave cornada que sufrió en el abdomen, esta precedida de evidentes dudas que hacían pensar en un fracaso. Mala suerte en el percance pues todo sobrevino en un tropezón. Rodrigo Muñoz sufrió una cornada en la parte baja del vientre izquierdo con un orificio de 15 centímetros con evisceración de vísceras y de asas del intestino delgado desgarrando la pared abdominal aproximadamente 20 centímetros. Estará internado de cuatro a cinco días y alrededor de un mes en rehabilitación. |