Se conmemoraban los cien años de la creación del Fomento del Turismo en Mallorca y con ello se adjudicaba una parte de su ya larga vida al protagonismo de la Fiesta en ese discurrir turístico. Asistió su Majestad el Rey de España, D. Juan Carlos I, a quien los disetros les brindaron sus primeras faenas, y la velada tuvo sus momentos de interés.

Con casi tres cuartos de entrada, se lidiaron dos toros de Sánchez Arjona y dos de Los Eulogios y dos novillos de Sánchez Arjona, manejables.

Jesulín de Ubrique, ovación y dos orejas

Finito de Córdoba, oreja y ovación

El novillero Cayetano, oreja y ovación.

No fue una tarde para el recuerdo, entre otras cosas porque era de noche, pero sí una velada entretenida con las distintas formas de entender el toreo de cada uo de los protagonistas. Además, Cayetano, a punto estuvo de lograr algún trofeo más, pues petición hubo para ello.