Con más de media plaza, se han lidiado toros de Domingo Hernández, el cuarto como sobrero, descastados y muy flojos.

El Cid, silencio en ambos

El Fandi, oreja y ovación

Eduardo Gallo, ovación y silencio.

Manuel Jesús "El Cid" llegó a Almagro con ganas de demostrar el buen momento por el que atraviesa pero ante un lote que poco se entregó no pudo lograrlo y se fue desencantado del lugar. En su primero poco pudo hacer con el capote. Lo mismo le sucedió con la muleta, quedando inédito puesto que el burel no presentaba pelea. Al final el toro se ha echado y "El Cid" ha tenido que coger el estoque y entrar a matar de media estocada.

En el cuarto bis si puedo lucirse con el capote toreando a la verónica. Con la muleta la faena la ha basado por el pitón derecho ya que por el izquierdo se mostraba el torero mucho más desconfiado. Mató de tres pinchazos y descabello.

David Fandila "El Fandi" comenzó con las rodillas en tierra para dar una larga cambiada combinándola con verónicas y chicuelinas rematando con la tradicional revolera. Quitó por chicuelinas y tafalleras. Con las banderillas revolucionó al público poniendo el último par al violín. Durante la faena estuvo muy encimista ya que el animal cuando vio que le habían ganado la pelea huía de la muleta del granadino. A base de circulares, molinetes y alguna trincherilla terminó su labor muleteril, sonando un aviso antes de entrar a matar. Estocada en todo lo alto.

Al quinto de la tarde lo recibió con dos largas cambiadas en el tercio, continuando con verónicas de rodillas. En banderillas pasó lo mismo que en el anterior toro. En esta ocasión al tener delante otro enemigo pudo hacer algo más con la muleta pero al dar un bajonazo no consiguió la oreja para abrir la puerta grande.

Al ser baja en el cartel José María Manzanares (padre) vino en su lugar el diestro salmantino Eduardo Gallo. Saludó a su primero a la verónica sin lograr acomplarse a su embestida. Por la mano derecha realiza toda la faena, eso sí toreando las dos primeras tandas muy despacito y gustándose. Lástima que al final el toro se haya quedado sin fuerzas. Pinchazo y estocada perpendicular que hace guardia.

En el que cerraba plaza recibió al toro muy bien a la verónica. Con la franela el toro se ha parado, tal vez lo que necesitaba el animal era que se le diera un poco más de distancia y no se le ahogara tanto aún así su actuación no destacó en demasía. Mató de dos pinchazos, estocada y descabello, llegando a escuchar un aviso.