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El público ha ocupado hoy los tendidos de la plaza de toros en proporción parecida a la de ayer lo que puede considerarse como una buena entrada. Se han lidiado toros de San Martín, bien presentados y muy parejos. Destacando el sexto por su comportamiento. Muchos se han quedado faltos de faena. Finito de Córdoba, bronca y bronca. Morante de la Puebla, ovación tras aviso y bronca. El Cid, ovación tras serie de pinchazos y oreja. Algo fallaba en la corrida de hoy pues no es normal encontrarse a toreros como Morante o como Finito en una corrida de Santacoloma. Así que los aficionados no las tenían todas consigo, barruntaban que esto podía ser un petardo como una catedral y descargaban todo el peso de la corrida en El Cid, que está más que curtido en estas guerras. Algo parecido a lo esperado es lo que ha sucedido a pesar de que haya habido alguna sorpresita. No ha sido ninguna sorpresa que Finito se haya acercado a su primero a miles de metros de distancia, intentando traérselo a base de zapatazos y de provocarle, saliéndose de la suerte cuando ésta se producía y estando constantemente al hilo del pitón. Más o menos todos lo esperaban así. Igual de esperado ha sido el rosario de pinchazos que ha recetado a su primero y los varios descabellos que han venido después. En el segundo idem de lo mismo: perfilero, fuera de cacho y dejando media estocada saliéndose de la suerte. Buena bronca ha llevado Finito y sin embargo mañana toreará en otro sitio y pasado en otro más y así va haciendo el de Córdoba una buena temporada en contratos. Aunque siempre pretenda torear desde Mataró, independientemente de la plaza en que se encuentre. No se puede ir así por la vida y tampoco por las plazas de toros. Hay que demostrar, cuando menos, un respeto al público que es quién da de comer y mantiene este tinglado en pie. Si ha sido de sorpresa el que Morante se haya plantado hecho un valiente delante del primero de su lote, que no regalaba nada a nadie. Lo ha recibido a la verónica y en algunas de ellas ha embarcado y desplazado con ese estilo suyo peculiar. Lástima que hayan sido un poco tropezadas. Verónicas en dos tandas, a falta de una. El toro ha sido cuidado en el caballo donde no ha demostrado demasiado. Soso pero de agradecer el quite de El Cid a la verónica. En la muleta toda la suavidad del mundo para ir metiendo en ella al burel. Todo muy suave, muy despacio, muy bien hecho, con el trapo siempre adelante, midiendo cada pase y enlazando con el otro. Era un toro complicado y había que hacerle bien las cosas y así ha ido tratando la derecha y la izquierda, poco a poco, lento, medido. Con muchos gusto se ha doblado con él, también muy suave y al final ha sacado una tanda ligada y bonita con la izquierda, tragando con el toro. Pinchazo y media estocada buena. Ha sonado el aviso. Valiente Morante con este saltillo picantón que levantaba la cara. Otra cosa ha sido lo de su segundo al que no ha querido ni ver y ha machacado en el caballo. Tres veces ha ido a él y las tres ha recibido candela. Macheteo desde el principio de muleta e incluso ha mandado a los peones a hacer la rueda, sin haber entrado aún a matar. Estocada baja y atravesada. Era de suponer que Morante podía dar una de cal y otra de arena. Quizás ese vaya a ser su sino... El Cid ha vuelto a perder una oreja por el mal uso de la espada. Quiere matar pero no quiere pasar y así no se matan los toros (manual de tauromaquia). Ha sido un toro complicado porque escarbaba durante toda la faena y se venía de pronto a las telas. Lo ha recibido con verónicas y en la muleta el toro ha buscado el cielo con la cara mientras pegaba tornillazos. Han sido primero dos muletazos y fuera para luego ir metiendo más al toro, consiguiendo la mejor ligazón en la mano izquierda. Faena de mérito para el Cid, sin oreja por el acero. Pinchazos y avisos pero ha recogido la ovación del respetable. Su segundo, sexto de la tarde, han apretado mucho en el capote, un toro pegajoso que se revolvía como es propio a su encaste y que rebañaba en la tela. A los medios le ha sacado el Cid para darle una media verónica de recurso con tal de despegárselo. La faena estaba en el pitón izquierdo y así lo ha visto el torero. Decisión, en los medios y a citar. Naturales al principio y muletazos después y el toro perdiendo gas, que al final ya no pasaba. Estocada y oreja. Destacar la actuación de la cuadrilla del Cid, muy buena y en la que se han desmonterado el Boni en el primero y Alcalareño en el segundo. En éste, además, muy buena la lidia del Boni. En la cuadrilla de Finito se ha desmonterado Curro Molina. Tarde interesante en el coso donostiarra de Illumbe. |
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